EL ADN de la semana

Arsénico

PERE Puigdomènech

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Los medios de comunicación se han hecho eco de un estudio publicado en la revista Science por investigadores americanos en el que se describen unas bacterias que viven en altas concentraciones de arsénico y que además lo usan en lugar del fósforo. Es un resultado sorprendente ya que sabemos que el arsénico es un potente veneno, y extiende algo más las condiciones en las que podemos encontrar organismos vivos. Dos semanas atrás recordábamos que el fósforo es esencial para la vida. Un concepto más que tendremos que revisar.

En la mayoría de los seres vivos el fósforo, a menudo en forma de fosfato, interviene en muchos procesos biológicos y los que no lo obtienen de la alimentación no pueden vivir correctamente. Si miramos la tabla periódica de los elementos encontraremos que justo debajo del fósforo está el arsénico. Esto quiere decir que los dos elementos tienen propiedades muy parecidas. En la mayoría de los organismos, cuando se ingiere arsénico los mecanismos de la célula lo usan en lugar del fósforo pero los productos que se generan no funcionan bien y el organismo puede morir.

Ahora sabemos que hay una bacteria que ha evolucionado de forma que puede funcionar con arsénico. Se trata de un organismo de la familia de las Halomonas que han denominado GFAJ-1 y que vive en el lago Mono de California, muy rico en arsénico. En el artículo se demuestra que cuando no hay nada de fósforo, GFAJ-1 vive de forma menos eficiente pero desarrolla todas sus funciones usando el arsénico en lugar del fósforo. Ahora habrá que comprobar si en todos los procesos donde se necesita el fósforo, como el ADN, este ha sido sustituido por el arsénico.

Hace tiempo que sabemos que hay organismos que viven en los lugares más inverosímiles. Los mecanismos de la vida evolucionan para adaptarse a las circunstancias más extremas y el hecho de que puedan vivir organismos basando su biología en arsénico en vez de fósforo amplía las condiciones donde puede haber vida. Esto hace la vida más interesante en su diversidad pero a la vez la hace menos excepcional.