Rodrigo Aguilar: «Montar un galgo afgano puede valer 2.000 euros»

De pequeño, en su Guatemala natal, Rodrigo Aguilar se entretenía peinando a los caniches de la familia, una afición que hoy es su oficio. Toca el violín, ha cantado en el Cor Jove del Orfeó Català y en la Orquestra de la Sagrada Família, y sus manos embellecen a canes y gatos en la peluquería Iru de Barcelona (Lesseps, 10). El dueño lo instruyó en la profesión. Aguilar prepara un manual sobre el arreglo del galgo afgano, la raza en la que se ha especializado y de la que son Ícaro y Chanel (foto), segundo y tercer clasificados el pasado día 6 en un concurso en Bilbao. Viajan siempre con el peluquero.

-¿Cuál es el premio en un concurso?

-Solo prestigio, no hay dinero en juego. Pero si un perro gana concursos importantes, aumenta el valor de su semen y montas. Por la monta de un galgo afgano con premios y pedigrí (el registro oficial de la pureza racial) se pueden pagar 2.000 euros. La mayoría se hacen por inseminación.

-¿Qué se requiere para tener pedigrí?

-Es necesario que el perro tenga dos generaciones por encima de él con pedigrí. En cada camada se tiene que solicitar el certificado de autenticidad de la raza.

-¿Qué le sedujo del galgo afgano?

-Es que se te cae la baba cuando los ves por la calle. La primera vez que me pasó a mí, en Barcelona, pensé que me gustaría tener uno, y años más tarde, cuando ya trabajaba en la peluquería, me decidí a comprar a Chanel. Me encanta su estilo al caminar, son muy soberbios, saben que son guapos, pero no son cariñosos. Son muy independientes, un poco perros-gatos, y muy tranquilos. Los galgos afganos son buenos perros para la casa, aunque necesitan salir a moverse, como antiguos perros de caza que fueron en sus orígenes en Afganistán.

-La melena del galgo afgano es como el plato estrella de un chef, en la peluquería...

-Justamente porque necesitan hacer mucho ejercicio, el pelo de los galgos afganos se enreda y se ensucia con facilidad. Para ir bien, se les debe hacer el baño y cepillado del pelo semanalmente. Aquí los bañamos con agua descalcificada y bálsamos y champús especiales con queratina que les ayudan a regenerar la grasa de la piel. Aunque peinamos a todo tipo de perros, nos hemos especializado en galgo afgano. Nos los traen de Lleida, de Vic, del País Vasco... Aprovechan si tienen alguna exhibición y nos los traen para prepararlos.

-¿Cuánto dura la sesión de peluquería?

-La del galgo afgano, unas dos horas en una limpieza, corte y peinado habitual. Si hay que hacer un arreglo porque lo presentan a una exhibición puede durar de cuatro a cinco horas. Cortar el pelo del galgo afgano es como hacer una escultura.

-¿Cuando van a concurso los arreglan el mismo día para que no se despeinen?

-Normalmente, el día antes, y el día del concurso se repasa. En mi caso, yo mismo, porque los llevo yo. Hay perros en copropiedad, uno los compra y otra persona los lleva a los concursos, por ejemplo.

-¿Qué más se les hace a los perros para participar en un certamen?

-Tienen que tener certificados que confirmen que están desparasitados, vacunados y microchipados. También se les revisa la dentadura y, si es preciso, se les pone ortodoncia o implantes. Y en otros casos se utilizan correctores de cola, cualquier cosa para mejorar su belleza y su manera de caminar y comportarse delante del juez.

-¿Los suyos siempre han concursado?

-Sí, cada uno participa en su categoría de edad. Ícaro tiene 18 meses, y Chanel 5 años, y también ha hecho pasarela junto a modelos. En un desfile de Carolina Herrera en el Hotel Vela causó impacto. En el photocall, los flases iban a por ella. Aunque, por un día, nadie la llamó Chanel para evitar un conflicto de firmas.