CRISIS HUMANITARIA

El Mediterráneo se ha cobrado ya la vida de un millar de personas en el 2018

Este ejercicio las llegadas de inmigrantes se han reducido a la mitad respecto al mismo periodo del 2017

Imágenes del fotógrafo norteamericano Kenny Karpov, envidadas desde el 'Aquarius'.

Imágenes del fotógrafo norteamericano Kenny Karpov, envidadas desde el 'Aquarius'. / SOS MEDITERRANÉE / KENNY KARPOV

Julia Camacho

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El Mar Mediterráneo sigue siendo la ruta de migración más mortífera del planeta, mucho más por ejemplo que la frontera entre Estados Unidos y México. En lo que va de año, la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) ha contabilizado 960 personas muertas o desaparecidas en las costas europeas, 292 de ellas en aguas españolas. Una cifra que se incrementó trágicamente estos días tras confirmarse esta semana el naufragio de tres embarcaciones con al menos 220 personas a bordo frente a las costas de Libia, lo que convierte el mes de junio en uno de los más trágicos para la inmigración en este 2018. No obstante, las cifras de llegadas se han reducido sustancialmente en este ejercicio, y se contabilizan la mitad de personas que en el 2017: 40.944 personas frente a los 84.675 migrantes registrados hasta el 20 de junio del pasado año.

El triste dato de ser la frontera más peligrosa del planeta lo confirmaba el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) el pasado jueves a partir de los testimonios de los supervivientes. La primera embarcación, de madera, desapareció el martes cuando trasladaba a un centenar de migrantes y refugiados. Solo cinco personas pudieron contarlo. Ese mismo día, un bote hinchable se hundió también en la misma zona, frente a las costas del país africano, con cerca de 130 personas a bordo. En esta ocasión, los servicios de rescate salvaron a 60 inmigrantes. El último naufragio se produjo, según ACNUR, el miércoles, cuando la Guardia Costera libia llevó a cabo una operación de rescate frente a las costas de Garabulli. Los supervivientes explicaron que “más de 50 personas que viajaban con ellos habían muerto”.

Menos de la mitad de las llegadas

Aunque el organismo de Naciones Unidas advierte de que el millar de muertos podría aumentar dado que en verano es cuando suelen aumentar las travesías para intentar escapar de la costa africana y cruzar a Europa de manera irregular, la OIM constata que las llegadas en el Mediterráneo en este 2018 se han reducido y se encuentran por “por debajo de la mitad” de los datos registrados en el 2017 hasta mediados de junio. E incluso apenas suponen el 19% del volumen de migrantes si se toma como referencia el 2016.

En este sentido, las muertes en el Mediterráneo también son “mucho más bajas” que en  periodos similares de los últimos dos años. Así, en el 2017 el Proyecto de Migrantes Desaparecidos de la OIM contabilizó 2.133 muertes hasta el 21 de junio; mientras que en el 2016 la cifra fue de 2.911, casi el triple que en el 2018.

El periodo con más llegadas

Las cifras más llamativas se producen en la ruta del Mediterráneo central, que une el norte de África con Italia. Según Flavio Di Giacomo, de la OIM en Roma, las llegadas de inmigrantes este año hacia los puertos italianos han caído un 78% respecto al mismo periodo del pasado año, y no superan las 17.000 personas. Junio ha sido el mes con más llegadas, pese al rechazo a acoger a los 629 migrantes recogidos por el 'Aquarius'.

En el caso de España, junio ha sido el mes con mayor número de llegadas este año, con 3.993 personas, y va camino de ser “el mes más activo de España en más de cuatro años”. Los últimos rescates se han producido este mismo viernes en Cádiz, donde Salvamento Marítimo localizaba a 182 inmigrantes a bordo de 18 precarias embarcaciones de plástico, todas ellas a unas 20 millas al suroeste de Tarifa. Entre los rescatados había 14 mujeres y dos niños.