Magnetismo floral en Girona

No hay época más concurrida en Girona que aquella cuando las flores toman literalmente las calles del Barri Vell. La muestraGirona, Temps de Florsvolvió a convertir ayer las calles en ríos de gente que con la ayuda de los codos y enarbolando cámaras de fotos y video intentaban hacerse un sitio en la primera fila de los más de 100 montajes florales que inundan el centro de la ciudad.

Hay demasiada gente",se quejaba José Mancera, un malagueño que vive en la ciudad. La muestra reúne a incondicionales como Maria Teresa Planes, de Tiana (Maresme), que cada año es fiel a la cita floral."Es un pecado no verla, es una de las cosas que no me pierdo por nada del mundo",comentaba mientras apuntaba en un plano los espacios visitados.

Girona, Temps de Florscumple 52 años en esta edición. A pesar de su veteranía, mantiene un espíritu joven y cada año propone diseños innovadores e imaginativos.

A menudo, las flores naturales son sustituidas, por ejemplo, por cajas de huevos, vasos de plástico o globos de colores."Con cosas muy sencillas consiguen montajes muy originales. Hay gente que sabe mucho",explicaba admirada Montse Bonet, que había llegado de Barcelona para ver la muestra. También se mantienen propuestas clásicas como la alfombra floral de las escaleras de la Pujada de Sant Domènec.

En esta edición se han engalanado 64 patios, 11 jardines y parajes naturales y se han montado 24 exposiciones más. La muestra se puede ver hasta el próximo 20 de mayo entre las diez de la mañana y las nueve de la noche. Como recomendaciones básicas, ir con tiempo y llevar calzado cómodo.