¿Por qué Snapchat no es para mayores?

FUGACIDAD ANTE TODO

Snapchat, a diferencia de otras redes, se basa en la fugacidad de los mensajes que cada usuario cuelga. No hace falta perseguir la belleza ni ser divinos como en Instagram, sino que se puede decir lo que se quiera, sea en texto, foto, vídeo o gráfico, que desaparecerá como máximo, máximo a las 24 horas. Pero la red alienta el intercambio constante de mensajes, que duran entre 1 y 10 segundos, para no perder el “estar en racha”, es decir, activo en la red social y no perder puntos, que la red asigna según el nivel de actividad y se obtienen trofeos.

LENGUAJE ADOLESCENTE

Hay muy poco texto. Si cambias muchos mensajes y estás activo, estás “on fire” y aparece un icono de fuego al lado del 'nick' de usuario. Los usuarios con los que más te relacionas son tus mejores amigos ('best friends forever', BFF, o abreviado en 'spanglish' adolecente 'befos' o 'las mejas') y les puedes asignar su propio emoji (icono). Las notificaciones son también iconos, no textos, y hay que aprenderse su significado.

También se insta a enviar 'stickers' (adhesivos con dibujos) o convertir la propia imagen en un 'gif' (minivídeo animado) como mensaje en vez de un emoji prefijado. Y la red anima a artistas a crear geofiltros, diseños que identifican a una comunidad concreta, para que quien se sienta identificado la use. Como el 'tag' de un grafitti.

SELFIES Y VÍDEOS

Snapchat se basa en el uso del móvil y sobre todo de la cámara frontal, la que se usa para el selfie. A la foto propia se le puede añadir filtros como cambiar la cara con otra persona, encuadres, máscaras, gráficos, se puede dibujar encima… Todo vale, pero para fotos de paisaje ya está Instagram.

Una foto o un vídeo se pueden ver durante un máximo de 10 segundos, aunque se puede pedir una repetición gratuita pero solo una vez al día. Si quieres más, las pagas. Se puede capturar la imagen con la opción de captura de pantalla del móvil, pero entonces llega icono a quien lo envió avisándole de que lo has hecho.

También se pueden hacer chats de vídeo, grabar mensajes de voz o realizar llamadas de voz, pero esto es casi una anécdota para una generación que ya no usa el teléfono para llamar.

TODO MEDIDO

Otro punto diferencial es que se pueden comentar los 'snaps' dentro del propio 'snap' y no en un espacio aparte como ocurre en Facebook. Es como un Power Point de bolsillo. Y cada uno sabe quién vio su historia, con nombre y apellidos, y no solo quién le dio a Me gusta.

CONSUMISMO

Hay un sistema de pagos dentro de la 'app' para poder transferir fondos, pagar por contenido de la aplicación (repeticiones, por ejemplo) o cualquier cosa que en el futuro a los propietarios se les ocurra, porque ¿no era esta la generación del consumo?