CRISI MIGRATORIA

Barcelona acoge a 150 inmigrantes en dos centros de la mano de la Creu Roja

Toni Sust

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En medio de un debate global sobre la acogida a los inmigrantes, que va de las jaulas para niños del presidente de EEUU, Donald Trump, hasta el rechazo del Gobierno italiano a que el 'Aquarius' desembarcara en sus costas, Barcelona ha vuelto a lanzar un llamamiento de alarma por la constatación de que los ayuntamientos se ven obligados a prestar una asistencia a los foráneos sin los recursos necesarios para hacerlo. Por eso la alcaldesa, Ada Colau, instó el lunes al Gobierno de Pedro Sánchez a aportar más presupuesto a las grandes ciudades, destinos frecuentes de muchos de los inmigrantes que llegan a las costas del sur de España en patera.

Colau se refirió a la llegada de autocares desde esta zona a causa del colapso en la acogida en localidades del sur de España. Creu Roja puntualiza que los inmigrantes llegaron a la capital catalana por varios medios: en tren, en autocares de ruta ordinaria y en autocares contratados por la propia entidad. También advierte de que su llegada ha sido más "un goteo" que una avalancha. En cualquier caso, los trasladados a Barcelona son inmigrantes que en su mayoría llegaron a la costa de Cádiz y Almería, que en su mayoría provienen de Guinea Conakry, Senegal y Camerún, y que si bien recibieron una primera atención médica a su llegada, no podían ser acogidos allí por encontrarse los recursos existentes desbordados.

El consistorio se preparó para acoger a este colectivo, para lo que ha tenido que emplear recursos no previstos. Barcelona ha habilitado para ello dos centros en los que ha acogido a 150 personas. De estas, 70 están en el centro de acogida nocturna de emergencias (CANE), situado en el pasaje Dos de Maig, que habitualmente solo está abierto durante los días más duros del invierno, cuando se activa la operación frío, y como un lugar para pernoctar. En el CANE se ha instalado solamente a hombres, de perfil joven. En el otro centro empleado  -el ayuntamiento prefiere no desvelar cuál es-, hay cerca de 80 personas, en este caso hombres y mujeres.

Posibles solicitantes de asilo

No todos los que llegaron en los autocares están en los centros. Algunos contaban con familiares o amigos que les esperaban. Los que sí han sido acogidos en instalaciones municipales son atendidos por personal de la Creu Roja. No tienen límite de fecha para irse, aunque se trata de acogida de emergencia, por lo que no se prolongará durante muchos meses. Se les da atención sanitaria, psicológica, tres comidas diarias y tiempo para descansar después de los viajes, de las mil historias dramáticas, que muchos de ellos acumulan. Creu Roja entrevistará a los acogidos y analizará cuántos están en posición de solicitar asilo.

"Es una primera acogida, que esta gente que viene de un trayecto duro tenga un momento de descanso", ha afirmado el teniente de alcalde de Derechos de Ciudadanía, Jaume Asens, en declaraciones que ha hecho en el CANE de Dos de Maig. "Necesitamos una corresponsabilización del resto de las administraciones. Queremos hacer un llamamiento a otros municipios del Área Metropolitana para que no nos dejen solos. Necesitamos que la Generalitat pase de las buenas intenciones a los hechos. El Parlament ya dijo en su día que quería implicarse pero que el Estado lo bloqueaba. Ahora es momento de demostrar que esta buena voluntad se materializa".

Asens ha pedido a la Generalitat que algunos de los foráneos que se queden y pidan asilo sean acogidos en otros municipios catalanes. Al Gobierno central, el teniente de alcalde le ha llamado a que mantenga en la frontera del sur de España la misma actitud que ha tenido con los inmigrantes del 'Aquarius' y que aporte parte del dinero que recibe de la UE: "Si no recibimos la ayuda del Estado, la situación es insostenible".