Cuidado con Annabelle

La británica Annabelle Wallis tiene su primer papel protagonista en la exitosa 'Annabelle'

Annabelle Wallis, en Sitges.

Annabelle Wallis, en Sitges.

J. M. F. / SITGES

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Todo esto sonará a trabalenguas, pero Annabelle Wallis (Oxford, 1984) no hace de Annabelle en Annabelle. La Annabelle del título es una muñeca diabólica aparecida en Expediente Warren. The conjuring -uno de los éxitos sorpresa del cine de terror reciente- que ahora ha logrado su propio spin-off /precuela.

En la película dirigida por John R. Leonetti, preestrenada en Sitges y recién llegada a salas comerciales, Annabelle Wallis es Mia, un ama de casa de los 60, tan embarazada como la Mia Farrow de La semilla del diablo, con devoción por las muñecas, incluso por las tan feas como Annabelle, que no se sabe bien cómo alguien se atrevería a fabricar. Su marido se la regala y llega el Mal.

Es una secuela barata y rodada rápidamente, en solo 25 días. Y rápidamente consiguió Wallis su papel. «Hice una prueba y, a los dos días, me volvieron a llamar». Del proyecto le atraía «la oportunidad de llevar una película, de superarme a mí misma. Y creo que ha valido la pena». La taquilla ha respondido: en el fin de semana de su estreno en EEUU, Perdida -una película mucho más grande- la superó solo por los pelos; 38 millones de dólares contra 37,2.

Wallis no tuvo que ver las grandes películas de terror de los 60 y 70 para inspirarse, porque se las sabe de memoria. «Soy fan sobre todo de Repulsión. Me gusta que Catherine Deneuve actúe de una forma tan contenida. Pero no estudié su papel. Creo que puede ser peligroso tener demasiadas referencias; un actor ha de confiar en sí mismo, en sus propios instintos». Cuando le digo que grita muy bien, no sabe cómo tomárselo. Parece halagada pero menos: «¡No quería gritar! No me gusta cuando las mujeres gritan sin parar en el cine de terror. Me reservo para algún momento, y cuando lo hago, funciona, porque tengo un grito muy grave, animal».La actriz británica parece destinada a la popularidad. Tras Annabelle, ahora se prepara para rodar Grimsby, una película escrita y producida por Sacha Baron Cohen, alias Borat. «Sacha es un conocedor del género y es un placer trabajar con él. Nos conocimos en Los Ángeles y estuvimos riendo durante dos horas». Wallis espera poder combinar sus proyectos en el cine con la serie de BBC Two Peaky blinders, de la que es romántica heroína. «Para mí es una serie que debería durar siempre».Como otras series en las que ha participado (Los Tudor, Pan Am) y la propia Annabelle, Peaky blinders es una historia de época (Birmingham 1919). ¿Qué le arrastra hacia ellas? «Es algo que me encanta, porque se introduce el elemento de la historia y ves cómo esta afecta a tu personaje. Por otro lado, suelo interpretar a mujeres fuertes, sobre todo para su época; algo que me interesa. Pero tampoco es que sea adicta a los corsés. Me gusta hacer de todo».