LA INGOBERNABILIDAD DE ESPAÑA

Sánchez inicia el diálogo con Rajoy e Iglesias pero sin avances

Pedro Sánchez interviene en la segunda votación de la investidura de Mariano Rajoy.

Pedro Sánchez interviene en la segunda votación de la investidura de Mariano Rajoy. / periodico

PATRICIA MARTÍN / IOLANDA MÁRMOL / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pedro Sánchez inició este martes su anunciada ronda de contactos con el resto de fuerzas políticas para buscar una solución al bloqueo político. El líder del PSOE empezó de mayor a menor y llamó por la mañana a Mariano Rajoy y ya por la tarde a Pablo Iglesias. La conversación con el presidente en funciones fue protocolaria y pese a que, según el PSOE, trascurrió en tono “cordial”, no hubo avances puesto que el secretario general de los socialistas insistió en su ‘no’ a Rajoy y este no logró convencerle, con los mismos argumentos que lleva utilizando semanas, de que “reconsidere” su postura. Tampoco hubo acercamiento con Podemos, dado que su líder sugirió a Sánchez que ve inviable un pacto con Ciudadanos y le pidió que se atreva a llegar a un acuerdo que con los partidos nacionalistas. Con Rajoy e Iglesias acordó seguir conversando en los próximos días, pero sin fijar reuniones concretas.

La conversación con el secretario general de Podemos se prolongó 24 minutos y en ella el socialista aprovechó para trasladar al líder morado su voluntad de que las “fuerzas del cambio”, en referencia a Podemos y C’s, mantengan un diálogo abierto que pueda ofrecer una solución al colapso en la gobernabilidad que deja tras de sí el fracaso de Rajoy en su investidura. Pero este le respondió que a su juicio solo existen dos posibilidades para un acuerdo de gobierno: o bien que Ciudadanos se abstenga y permita a un Ejecutivo progresista, o bien un pacto con ERC, PDC y PNV. Iglesias reconoció en la charla que aunque lo "sensato" sería que la formación naranja facilitase el desbloqueo, no le parece que esta sea una opción que contemple el partido de Albert Rivera, al que ve "instalado en un proyecto con el PP".

Por ello, instó al jefe de los socialistas a llegar a consensos con los nacionalistas, que si bien reconoció que son “complejos y difíciles”, en su opinión podrían sentar las bases de "un nuevo diálogo fraternal que buscara soluciones democráticas a las tensiones territoriales". El secretario general de Podemos le transmitió además que desea formar parte de las soluciones y ambos se emplazaron a seguir conversando en los próximos días.

UN GOBIERNO REGENERADOR

El único acuerdo que dejó tras de sí la charla es que Sánchez e Iglesias comparten que lo que más conviene a España es un gobierno que implemente un programa de justicia social y regeneración democrática. Pero menos consensos hubo aún en la conversación con Rajoy, de apenas 10 minutos. Eso sí, como Sánchez ha rehuido el diálogo con el presidente en varias ocasiones, este aprovechó para pedir al socialista que “reflexione sobre el bloqueo, la desconfianza y el malestar que está provocando [la situación] en los ciudadanos”, según informó La Moncloa. Asimismo le recordó que su apuesta sigue siendo la gran coalición pero, ante el rechazo del PSOE, le instó a “reconsiderar” su postura y abrir al menos negociaciones sectoriales sobre temas de Estado como la amenaza independentista, el sistema de financiación, el modelo educativo, las pensiones, la violencia de género o las reformas institucionales pendientes.

En definitiva, el presidente reiteró ante Sánchez los principales argumentos que ya usó en el debate de investidura, en torno a la necesidad “urgente” de que en España haya un gobierno que apruebe en el futuro inmediato unos presupuestos, adopte medidas para atajar el déficit y dé respuesta a la “amenaza gravísima” que llega desde Catalunya. Todo ello configura una “situación excepcional que obliga a los representantes públicos a adaptar decisiones en consecuencia”, según el comunicado de la Moncloa.