Rajoy abre la puerta a reformar la Constitución la próxima legislatura

Mariano Rajoy abrió este viernes la puerta a una reforma de la Constitución, pero ya en la próxima legislatura. "La Constitución se puede modificar. Ya se hizo en dos ocasiones (...), pero cada legislatura tiene sus prioridades y la de esta que va a terminar era evitar la quiebra de España", afirmó el presidente en los jardines del palacio de Marivent tras la tradicional audiencia estival con el Rey. A renglón seguido, aseguró que no se niega a que esta reforma se pueda llevar a cabo después de las generales. Asimismo, también fijó para la próxima legislatura la reforma del modelo de financiación. "Lo que está claro es que no se va a producir ninguna secesión en España", subrayó.

Hasta ahora, Rajoy siempre había dicho que no rechazaba una reforma de la Carta Magna, pero que no era el momento, sin llegar a concretar su alcance. El presidente ha elegido el mes de agosto para ampliar el horizonte y esbozar los aspectos que modificaría, en la línea de lo expresado por el ministro de Justicia, Rafael Catalá Rafael Catalá, la víspera. Esto es: la sucesión a la Corona y la delimitación de las competencias de las autonomías. Este anuncio se produce, además, en un momento clave, con las elecciones catalanas a la vuelta de la esquina y adelantándose a Ciudadanos, que en septiembre presentará su propia propuesta de reforma constitucional. Igual que hará el partido de Albert Rivera, Rajoy habló este viernes de buscar complicidades y realizar los cambios siempre desde el consenso más amplio.

EL INFORME DE RUBIO LLORENTE

Para Rajoy, el alcance de esa posible reforma constitucional se recoge en el dictamen elaborado por Francisco Rubio Llorente en el 2006 como presidente del Consejo de Estado, cuya lectura recomendó este viernes a los periodistas. Aquel texto analizaba, a petición del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, cuatro modificaciones: la reforma del Senado, la inclusión del nombre de las comunidades, la referencia a la Constitución Europea y la eliminación de la preferencia del varón en la sucesión a la Corona. El dictamen ya apuntaba que las tensiones podrían venir por la fijación del techo competencial de las autonomías.

El presidente del Gobierno desvinculó totalmente la posible reforma constitucional de la situación política catalana y cargó contra los soberanistas, a los que acusó de generar un clima de crispación. "Una cosa es lo que los independentistas catalanes digan y otra cosa es la reforma de la Constitución. Una reforma constitucional no contentaría a los independentistas porque ellos quieren liquidar la soberanía nacional. Y ninguna reforma de la Constitución contemplará eso", advirtió Rajoy, quien aseguró que hasta el 27-S irá mucho a Catalunya "para hacer mucha campaña".

OTROS TEMAS

Durante la audiencia, el presidente y el Rey analizaron la situación económica, los Presupuestos para el próximo año, la situación en Turquía, las próximas elecciones en Argentina y Venezuela y la operación Paso del Estrecho, donde se prevé un aumento del 10% del número de personas que tratan de atravesarlo. Rajoy llegó a Marivent de Doñana, donde pasaba unos días de vacaciones. Tras la audiencia real, cenó con el Monarca y partió hacia Madrid, donde recaló para retomar otros días de descanso en la localidad pontevedresa de Ribadurnia.