LA PRECAMPAÑA ELECTORAL

El PP catalán recurre ante el Constitucional la ley del cine y el Codi de Consum

Los conservadores reivindican el derecho "a usar el castellano con libertad"

JOSE RICO

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Un nuevo conflicto lingüístico se avecina sobre Catalunya. El PP presentará esta semana un recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) contra la ley catalana del cine y el Codi de Consum, puesto que ambas normas vulneran el derecho "a usar el castellano con libertad". El anuncio llega después de que el alto tribunal haya admitido a trámite la impugnación del Defensor del Pueblo contra la ley de acogida, también por la preferencia que otorga al catalán en la integración de los inmigrantes.

Tras dos meses estudiando la viabilidad del recurso, la presidenta y candidata del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ha asegurado que la decisión de su partido es "la única posible ante la irresponsable actitud del tripartito" a la hora de aprobar leyes al margen de la Constitución, y ha añadido que, si el PP es decisivo tras las elecciones del 28-N, en la próxima legislatura realizará "las reformas y modificaciones necesarias para que ambas leyes dejen de estar en vigor".

Cuotas mínimas de doblaje

El recurso contra la ley del cine se basa en los apartados que establecen cuotas mínimas de doblaje al catalán, y reclama la supresión de las sanciones económicas vinculadas a no rotular en catalán. "Hay muchas formas de incentivar la lengua, pero no a través de cuotas y sanciones", ha advertido. Otro partido, Ciutadans, anunció el lunes que llevará la normativa al Defensor del Pueblo para exigirle que la recurra ante el TC.

En cuanto al Codi de Consum, los conservadores se oponen a él porque establece multas de hasta 10.000 euros para aquellos comerciantes que no rotulen en catalán, una cantidad mayor de las sanciones que fijaba la anterior normativa.

Debates electorales

Por otra parte, Camacho ha propuesto a todos los partidos catalanes que uno de los debates entre los seis candidatos a la presidencia de la Generalitat sea en castellano. La dirigente popular ha tildado de "gravísima ofensa" las palabras del secretario general adjunto de CDC, Felip Puig, quien calificó de "insultante" para el electorado que se celebrase en castellano un cara a cara entre los líderes de CiU y el PSC, Artur Mas y José Montilla.

"Con CiU corremos el peligro de una especie de totalitarismo lingüístico. No podemos pasar de la Catalunya de la sanción lingüística a la Catalunya de la vulneración y persecución de los derechos", ha añadido.