PERFIL DEL EXPRESIDENTE DE LA COMUNIDAD DE MADRID

Ignacio González: la (pen)última rana de Esperanza Aguirre

Tras casi tres décadas a la sombra de la 'lideresa', los escándalos de corrupción truncaron la carrera política del dirigente popular

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JÚLIA REGUÉ / BARCELONA

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Tras casi tres décadas ocupando innumerables cargos públicos, entre los que destacan el de presidente de la Comunidad de Madrid o el de secretario general del PP en este territorio, Ignacio González (Madrid, 1960) ha sido detenido este miércoles por supuestas irregularidades en la gestión del Canal de Isabel II, un caso que se suma a los diferentes escándalos que han salpicado su trayectoria.

González construyó la mayor parte de su carrera política a la sombra de Esperanza Aguirre, a quien conoció con tan solo 24 años en el Ayuntamiento de Madrid. Cuando en 1996 fue designada ministra de Educación por José María Aznar, se lo llevó con ella y le nombró subsecretario de Educación y Ciencia. Y, en el 2003, aterrizaron juntos en el Gobierno de la Comunidad de Madrid como presidenta y vicepresidente.

La recompensa a tanta fidelidad le llegó en septiembre del 2012, cuando tomó el relevo de Aguirre tras su dimisión por "motivos personales", pero su deseo de ser reelegido en los comicios del 2015 se truncó al ser imputado por el 'caso Ático'. Mariano Rajoy no dudó en aquel momento en aupar a la primera línea a Cristina Cifuentes, impulsora de la investigación que ha desembocado este miércoles en su detención.

EL 'CASO ÁTICO'

El escándalo por el ático de González en la localidad malagueña de Estepona estalló en el verano del 2011, cuando se conoció que, tras alquilar la lujosa vivienda durante un tiempo, la adquirió por 770.000 euros, una cifra muy por debajo de su valor real, que rondaba los 1,3 millones. Durante unas pesquisas policiales se grabaron unas conversaciones telefónicas de las que los investigadores desprendieron la posibilidad de que se estuviera cometiendo un presunto delito de cohecho y blanqueo de capitales.

La denuncia inicial fue interpuesta por el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y se abrió una investigación policial. Al parecer, el comisario Pedro Javier Villate vendió en el 2008 el ático y tres plazas de garaje a la inmobiliaria Coast Investor, pero no inscribió la compraventa en el Registro de la Propiedad por "tema de impuestos". Según los denunciantes, la esposa de González, Lourdes Cavero, suscribió entonces un contrato de arrendamiento del ático de larga duración, por unos 2.000 euros al mes, un precio "muy inferior" a la media que se paga en la zona, unos "6.000 euros al mes", y pagados a una empresa "sin actividad".

En marzo del 2015, apenas dos meses antes de las elecciones autonómicas, salió a la luz que González tuvo una reunión con varios mandos policiales implicados para pedirles que no transcendiera que era inquilino del citado ático adquirido por un testaferro a través de una sociedad radicada en un paraíso fiscal, concretamente en Panamá.

Una información que González se apresuró a negar y a darle la vuelta, asegurando que sí se reunió con los comisarios Enrique García Castaño y José Villarejo, pero en un encuentro en el que fue víctima de un intento de "extorsión" policial para que retirase las denuncias por la investigación sobre el ático.

El caso sigue en proceso de instrucción y además de González, también están imputados su mujer y el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo.

LOS ESPÍAS DE AGUIRRE

Otro escándalo en el que se ha visto envuelto ha sido el de la trama de espionaje de la Comunidad de Madrid. En el 2009, la investigación lo puso bajo sospecha, pero él mismo acabó siendo objeto de seguimiento durante un viaje a Colombia. González rehuyó una y otra vez admitir la existencia de estos espías pese a las informaciones que confirmaban que, desde la Consejería de Interior, presidida en aquel momento por Francisco Granados, ahora en prisiónFrancisco Granados, se creó una trama financiada con dinero público para perseguir adversarios políticos de Esperanza Aguirre, como fueron el exvicealcalde de Madrid Manuel Cobo y el exvicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior de la comunidad Alfredo Prada.

Dijo la expresidenta de la Comunidad de Madrid que de los "más de 500 altos cargos" que había nombrado "solo dos le habían salido rana"Granados y el también exconsejero Alberto López Viejo. Parece que ahora debe sumar otro a su lista.