El PP dice no querer elecciones y pide al PSOE un pacto "estable"

Cautela y prudencia. Son las máximas a las que el PP se aferra ante la crisis del PSOE. Pese a que los populares llevan meses ansiando el relevo de Pedro Sánchez, aún ven "complicadísimo" que el PSOE facilite el gobierno popularobierno popular. De ahí que Mariano Rajoy trasladara este lunes al comité de dirección de su partido la consigna de esperar a que el PSOE se aclare y, mientras tanto, huir de la prepotencia, de la tentación de trasladar la imagen de que, ante la debilidad socialista, los populares tienen la sartén por el mango, y de que, si no se aceptan sus condiciones, el PP no teme ir una nuevas elecciones. De hecho, aunque la victoria del PP en Galicia y el declive del PSOE hacen prever que Rajoy ganaría fuerza, el partido conservador dice no querer tentar la suerte y temer, además, que Pablo Iglesias salga reforzado. "Las urnas las carga el diablo", concluyen.

Por ello, Dolores de Cospedal subrayó este lunes que "todo el mundo sabe que el PP no quiere" elecciones. Aun así, por si estas se producen, su grupo registró una reforma electoral para que la convocatoria sea el 18 y no el 25 de diciembre, dejando la campaña en solo una semana. Asimismo incidió en que la postura de su partido "es la misma" desde enero.

Aunque la Moncloa trasladó el pasado fin de semana que Rajoy quiere ahora un acuerdo más allá de la investidura, que implique el apoyo a los presupuestos y garantice cierta estabilidad, su número dos en el PP incidió en que "la oferta" no ha variado: o bien un gobierno en coalición, o bien pactos puntuales de Estado o bien que el PSOE les permita gobernar en minoría.

En este último caso, los populares buscan un pacto estable; por ello también intentaron que Ciudadanos se comprometiera a apoyar las cuentas. "Los españoles quieren un gobierno que les dé estabilidad", recordó Cospedal. Para allanar el camino, Rajoy telefoneó al presidente de la gestora socialista, Javier Fernández, para desearle suerte y ambos quedaron en volver a hablar. Fue una llamada protocolaria. Su intención es que el PSOE arroje más luz antes de hacer más movimientos.