LA SITUACIÓN TRAS los comicios deL 25-M

El 59% de los españoles creen positivo el fin del bipartidismo

XABIER BARRENA
BARCELONA

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Retroceso del blanco y negro y eclosión de grises. Esa fue la sentencia que dictaron las urnas, en una lectura en clave española, en las elecciones europeas del pasado 25 de mayo. Una máxima que la encuesta del GESOP confirma en toda su extensión. Casi seis de cada 10 españoles consideran que el retroceso del bipartidismo del PP y el PSOE es positivo para España, frente al 30,1% que lo ven con malos ojos.

Por votantes de partidos, en todas las fuerzas predominan quienes abogan por el fin del bipartidismo, excepto en el PP. Solo el 23,7% considera positiva la pérdida de la hegemonía, por el 64,4% que lo percibe como negativo. En el PSOE, sus electores siguen la pauta de la media. El 56% está satisfecho y el 31,9%, descontento.

En cuanto al resto de fuerzas, son los que eligieron la papeleta de Podemos el 25-M quienes más felices se hallan por el nuevo mapa político. El 78,9%, frente al 16,3%. Tras la neonata fuerza de Pablo Iglesias se encuentra ERC (78% contra el 12%).

Que este retroceso tiene visos de confirmarse e, incluso, redoblarse lo demuestra la pirámide de edad. Los segmentos más jovenes abogan por el pluripartidismo, los de más edad, por el bipartidismo. En la franja de los mayores de 60 años vence el apoyo a los dos grandes partidos por un ajustado 42,1% a 41,1%. Entre los que tienen entre 18 y 29 años vence el pluripartidismo por el 73,7% frente al 19,7%. El voto antibloque PP-PSOE, asimismo, toma mayor fuerza en los grandes centros urbanos.

EL PP Y CIUTADANS / Así las cosas, parece normal que la encuesta delate que la propuesta de gran coalición entre PP y PSOE -que, por ejemplo, propuso el expresidente del Gobierno Felipe González- no cuenta con la aceptación de la mayoría de la sociedad española. Hasta el 61,1% se manifiestan en contra, por el 31,4% que están a favor.  Los más acérrimos defensores de esta santa alianza son los votantes del PP, con el 71,1%, seguidos muy cerca, curiosamente, de los de Ciutadans (68%), quizá porque piensan que la prioridad ahora mismo es el órdago soberanista catalán y que la suma de ambos partidos, -que ya se produjo, por ejemplo, en el Congreso el pasado 8 de abril a cuenta de la consulta- puede ser el mejor de los antídotos.

Los electores del PSOE no se muestran especialmente entusiasmados. Es más, se oponen frontalmente: el 71,4% lo rechaza. En el análisis territorial, es en Euskadi y Catalunya (con porcentajes que superan el 75%) donde está el principal foco opositor a ese eventual pacto, mientras que en las dos Castillas y la Comunidad Valenciana, con guarismos del 40%, es donde más se avala esa opción.

NEOFRENTE POPULAR / ¿Y qué es lo que le gustaría al electorado del PSOE? Pues en un 80,2% lo mismo que al 86,5% del de IU y el 78% de Podemos: un frente de izquierdas contra el PP. Que, dicho esto en una semana donde se ha visto una multitud manifestándose por la república en la Puerta del Sol, bien podría bautizarse como nuevo Frente Popular.

De nuevo es en Euskadi y Catalunya donde este neofrente contaría con más apoyo (sobre el 70% a favor en ambas comunidades) . Y en la Comunidad Valenciana (49%) y Madrid, ambas Castillas y Galicia (estas con el 43% en contra) donde se percibiría con mayor escepticismo esa unión de fuerzas de la izquierda. El apoyo a la suma se percibe no solo entre los más jóvenes, sino incluso entre los que cuentan con más de 60 años y que, en teoría, con más precauciones (históricas) podrían abrazar esta opción (44,7% a favor frente al 42, 7% en contra).