Foro Primera Plan@

Arrimadas: "Muchos socialistas no entienden que el PSC vete a C's y pida indultar a Junqueras"

La candidata de C's sostiene que socialistas y 'comuns' van encaminados a forjar otro tripartito con ERC

Rafa Julve

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Inés Arrimadas seguía este lunes en el foro Primera Plan@ de EL PERIÓDICO con la voz bastante tomada después de tanto acto electoral, pero ha forzado las cuerdas vocales para redoblar sus llamamientos a concentrar el voto constitucionalista en su partido con un nuevo ataque al presidenciable del PSC: "Muchos socialistas no entienden cómo el señor Miquel Iceta veta a Ciutadans y promete inmediatamente el indulto a Oriol Junqueras". Según sus previsiones, esos gestos indican que "se está preparando un acuerdo para formar un tripartito entre PSC, Esquerra y Podem", lo que considera que serviría para "alargar el 'procés'".

Para evidenciar las distancias en ese ámbito con los socialistas, Arrimadas ha rematado con que su partido está totalmente en contra de los aforamientos a los políticos y de los indultos por malversación porque no se les puede tratar diferente que a la gente de a pie, pero, volviendo a los pactos, también ha lanzado un puñado de invectivas a los 'comuns'. "Podemos tiene un problema: sus dirigentes son abiertamente independentistas, como su número dos, Elisenda Alamany, pero sus votantes no lo son. Si al final dependemos de los 'comuns' [para formar gobierno], tendrán muy difícil explicar a sus votantes que se alarga el 'procés' y no se dedica el dinero invertido en este en políticas sociales", ha aseverado la candidata naranja.

En todo caso, el objetivo de Ciutadans pasa por no necesitar siquiera de la abstención de Catalunya En Comú Podem y tratar de forjar un Govern solo con el PSC y el PPC. "No es ninguna utopía. Tenemos una oportunidad de oro", ha manifestado la cabeza de cartel. Y para empezar a tender puentes ha puesto sobre la mesa la idea de incorporar a independientes sin carnet de partido en ese hipotético ejecutivo. Eso, ha reflexionado, permitiría facilitar las alianzas, que en el caso de los populares los naranjas dan por hechas.

El problema para Arrimadas, sin embargo, sigue siendo que Iceta se mantiene firme en su rechazo a investirla presidenta. El líder socialista, que ya pinchó hace días el globo sonda de los indultos y niega por activa y por pasiva que vaya a pactar con los independentistas, continúa confiando en que será necesario el concurso de los 'comuns' y que estos apostarán por él. Un encaje de bolillos que en Ciutadans ven harto difícil porque temen que los de Xavier Domènech se acaben decantando hacia ERC y fuercen al PSC a hacer lo propio. Por eso tratan de evidenciar que a Iceta no le queda más remedio que alinearse con ellos.  

La clave de la movilización

Pero Arrimadas no deja de repetir en sus actos que para que eso se cumpla entra un juego un elemento clave.

'Ara sí, votarem' es el lema de campaña de los naranjas, que no han dejado de llamar a la movilización de los contrarios a la independencia en ninguno de sus mitines. Al margen del trasvase de votos de un partido a otro, en el cuartel general de Ciutadans tienen muy claro que la participación puede ser determinante para decantar el resultado hacia un bloque u otro y, como el resto de fuerzas en liza, no quieren dar por hecha una masiva afluencia a las urnas, sobre todo por la incógnita de unas elecciones en día laborable. "La clave será hacer salir a la calle a la gente a votar como no se ha hecho nunca", ha subrayado la aspirante.

Con los últimos sondeos publicados evidenciando un tira y afloja por la mayoría absoluta hasta el último momento, ese factor todavía gana más peso si cabe, pero es que en Ciutadans también miran con lupa su pugna particular con ERC por ser el partido más votado. "¿Se imaginan el simbolismo que tendría que un partido netamente constitucionalista ganara las elecciones después de todo lo que hemos vivido con el 'procés?'", repiten constantemente.  "Hay que enviar un mensaje claro al mundo de que nunca ha habido mayoría absoluta a favor de la independencia", ha reiterado la candidata.

Tras pescar a manos llenas en los caladeros del PPC, según las encuestas, los de Arrimadas seguirán tratando de arañar votantes a los socialistas hasta el último momento, como se ha vuelto a ver este lunes, aunque sus esperanzas no solo se depositan en el flanco constitucionalista. El 'ball de bastons' entre soberanistas -Esquerra poniendo en duda que Carles Puigdemont pueda ejercer de 'president; Junqueras afirmando que él no se "esconde" y Puigdemont respondiendo que él tampoco lo hace porque se presentó ante la justicia belga; JxCat avisando de que no aceptará otra investidura que no sea la de su líder, la ANC alineándose con los posconvergentes, la CUP presionando por la unilateralidad...- es otro elemento que los naranjas creen que puede jugar a su favor.  Están convencidos de que ya no hay trasvases extramuros y que solo puede haber fugas internas en cada flanco, por lo que cuando más equilibrada esté la batalla entre ERC y JxCat, calculan, menos altos serán los porcentajes de voto de cada uno de ellos. De esta manera, si a Ciutadans le sale bien la jugada de arañar papeletas a populares y socialistas, los guarismos que obtenga (especialmente en el área metropolitana de Barcelona y en Tarragona) pueden catapultarle al primer puesto del podio.

Y si gobernara...

¿Y qué haría entonces Arrimadas si pudiera gobernar? Aparte de encargar una auditoría para detectar errores de gestión en la Generalitat y destinar el dinero del 'procés' a políticas sociales, la dirigente naranja ha afirmado que no "mentiría como Carles Puigdemont" y buscaría la "reconciliación" entre catalanes gobernando "para todos", no como el 'expresident', "que no ha gobernado ni para los independentistas porque no ha cumplido con lo que les dijo". "Yo respetaré a todos los catalanes y no les insultaré llamándoles súbditos o traidores, y les representaré en todos los sitios donde se hable de cosas importantes para Catalunya", ha manifestado en clara referencia a la ausencia del Ejecutivo de JxSí en la cumbre de presidentes autonómicos y en los debates sobre un nuevo modelo de financiación. Solo copiará una cosa de Puigdemont, ha dicho, que es "no hacer la independencia". Porque, al final, y después de que "aquellos que hablaban de déficit fiscal hayan conseguido reducirlo a base de empobrecer Catalunya", no ha habido ninguna "Arcadia feliz".