El Govern dejará en manos del Parlament los cambios en el IRPF

El debate sobre la bajada del IRPF para las rentas más bajas de Catalunya y el modo en qué ha de compensarse la recaudación debe producirse en el Parlament, a raíz de las propuestas que hagan los grupos, y no en el seno de la Generalitat. Esta es la tesis que maneja el sector convergente del Governsector convergente del Govern, que subraya que ni el proyecto de presupuestos ni la ley de acompañamiento que serán aprobados por el Ejecutivo catalán contemplarán ningún cambio de carácter fiscal. 

De hecho, la ley que debería servir para modificar los tipos autonómicos del IRPF, y que momento solo está en la fase de borrador de anteproyecto (aún no ha pasado a debate en el Govern), solo incluye una referencia a este impuesto: un retoque en la deducción para los donativos que se hagan a favor de los institutos universitarios y otros centros de investigación integrados o adscritos a las universidades catalanas y los centros de investigación promovidos por la Generalitat. El impacto negativo de esta deducción en los ingresos se calcula en 67.000 euros. Es la única medida que hace referencia al impuesto sobre la renta en el borrador con el que trabajará el Govern, por ahora, por lo que, tal como ha dicho este miércoles la vicepresidenta Neus Munté en Madrid, las posibles modificaciones de los tipos que estudia Economia, con reducciones para ingresos inferiores a los 17.700 euros, en principio se deberán introducir en el debate parlamentario de la ley.

ADAPTACIÓN DE SENTENCIAS

El borrador incluye varias modificaciones de tributos que han quedado afectados por suspensiones o sentencias del Tribunal Constitucional. En todo caso, y por lo que respecta estrictamente al IRPF, las fuentes consultadas recalcan que el equipo gubernamental debe elaborar una propuesta que se ciña al programa electoral de Junts Pel Sí, que es “lo consensuado” y que se plantea como reto disminuir la presión en el tramo autonómico del IRPF para las rentas más desfavorecidas, pero “también” para las que soportan mayor carga impositiva. “El debate esta ahí”, indican, circunscribiendo las medidas que se puedan acordar al respecto al ámbito parlamentario y haciendo hincapié en que los problemas de infrafinanciación de los que adolecen las arcas catalanas no deben en ningún caso tratar de solucionarse a costa de los ciudadanos.

Este miércoles, tras realizar una visita a la sede de UGT en Madrid, la vicepresidenta del Govern, Neus Munté, ha recalcado que el compromiso de la Generalitat es "rebajar" la presión fiscal sobre las rentas bajas y medias, y que en el proyecto de presupuesto de este año no figura ningún incremento del IRPF.

En todo caso, fuentes convergentes del Govern dicen estar dispuestas a escuchar las propuestas que en el seno de la Cámara legislativa puedan hacer los distintos grupos –dando por sentado que saldrá a colación la solicitud de más fiscalidad para rentas más altas- añadiendo que se pondrá especial atención a las que busquen una “mejora de la progresividad y de los ingresos” sin cargar aún más “a los que ya están más presionados”. En este contexto no se descarta estudiar la viabilidad de nuevas figuras impositivas.

LA 'PROPUESTA JUNQUERAS'

El Departament d’Economia i Hisenda, que dirige el vicepresidente Oriol Junqueras, de ERC, tiene el objetivo político de rebajar los impuestos a las rentas por debajo de los 17.707 euros en el tramo autonómico del IRPF, cuyo tipo efectivo medio (una vez aplicadas las deducciones) del tramo catalán actualmente se sitúa en el 12%, el más alto de España, y compensar esta menor recaudación con una subida de tipos a los que tributan por ingresos de más de 100.000 euros. Un 34,58% de contribuyentes cuenta con ingresos anuales de menos de 12.000 euros.

De hecho, Economia ha impulsado un estudio que remitirá al Parlament con el objetivo de “hacer un impuesto socialmente más justo y progresivo” sin subir globalmente el IRPF, en una estrategia que entronca con la vocación de ERC de aligerar las cargas fiscales de las rentas más bajas, según han explicado fuentes de dicho departamento. Esas mismas fuentes indican que el objetivo era incorporar este cambio en la ley de acompañamiento de los presupuestos y lograr el apoyo del máximo de fuerzas parlamentarias, entre las que se buscaría la complicidad de la CUP, el PSC o Catalunya sí que es pot. Sin embargo, esta propuesta no cuenta con el apoyo de la parte convergente del Govern y el propio 'president', Carles Puigdemont, ha asegurado que no hay intención de subir impuestos.

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