TRAS 13 AÑOS EN EL CARGO

Duran Lleida da el paso atrás

El líder de Unió confirma su renuncia a la secretaría general de CiU, que asumirá Ramon Espadaler

Duran aclara su posible dimisión

Duran i Lleida ha salido a aclarar su posible dimisión como número dos de CiU. / periodico

ENRIC HERNÀNDEZ / Barcelona

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La de Josep Antoni Duran Lleida ha sido una dimisión en diferido. Después de que, el pasado 8 de junio, EL PERIÓDICO revelase su decisión de abandonar la secretaría general de CiU, el líder democristiano reconoció que había abierto un proceso de "reflexión", pero aclaró que no daría el paso definitivo hasta haberlo acordado con Artur Mas.

Ese primer paso atrás -no confundir con una retirada de la política- se producirá este lunes. Según fuentes próximas a Duran, a primera hora de la mañana comunicará a la permanente de Unió Democràtica su renuncia a la secretaría general de la federación, cargo que ocupará el 'conseller' Ramon Espadaler. La dimisión se formalizará a partir de las 11 horas ante la Comisión Ejecutiva Nacional de la Federación (CENF), en presencia de Mas y de Jordi Pujol.

El giro independentista de CiU

En vísperas de la anunciada entrevista entre el 'president' de la Generalitat y el jefe del Gobierno central, Mariano Rajoy, Duran no tiene interés alguno en vincular esta decisión a sus discrepancias --unas veces explícitas, otras soterradas-- con el giro independentista que CiU emprendió en puertas de las elecciones anticipadas del 2012 --en las que Mas se dejó 12 diputados--, y que no ha hecho sino agudizar tras sellar un pacto de gobernabilidad con Esquerra Republicana.

Un golpe de timón, este sí, que ha hinchado las velas electorales de la nave que capitanea Oriol Junquerasvictorioso en las europeas del 25-M tras haber superado a CiU por primera vez en el 2013 en el Barómetro del GESOP para EL PERIÓDICO y haber incrementado su ventaja en la encuesta más reciente, del pasado 24 de junio. El líder democristiano dice y repite en público que su apuesta por la consulta soberanista es firme, pero en privado no oculta sus diferencias con una estrategia que, a su juicio, abocará a muchos catalanes a la frustración y a CiU, a una debacle electoral.

El inmovilismo de Rajoy

Tanto o más ha pesado en su ánimo el inmovilismo del Gobierno de Rajoy. El dirigente democristiano lleva muchos meses insistiendo a sus interlocutores gubernamentales, tanto el presidente como la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, que la mayoría de los catalanes acabará abrazando el credo independentista si el Ejecutivo no aborda este desafío con inteligencia y un talante dialogante.

Hasta que, harto de predicar en el desierto, el pasado enero abandonó la presidencia de la comisión bilateral Estado-Generalitat, inactiva desde hace dos años. En alguno de sus no pocos rifirafes con Rajoy en sede parlamentaria, incluso ha llegado a advertirle de que, si no mueve ficha, se encontrará con una declaración unilateral de independencia (DUI) del Parlament catalán.

Duran cierra este lunes una etapa de 13 años como secretario general de la federación nacionalista, cargo al que accedió como premio de consolación después de que Pujol ungiera a Mas como su sucesor, en tanto que 'conseller en cap' y candidato de CiU a la Generalitat. Pero lo hace no antes de haberse asegurado los dos objetivos que se fijó.

Seguirá como portavoz de CiU en el Congreso

El primero, que la continuidad de la federación quedase garantizada con la elección como secretario general de Espadaler, presidente del Consell Nacional de UDC y firme candidato a sustituir a Duran como líder del partido democristiano. Y el segundo, que Mas aceptase su decisión de seguir hasta el final de la legislatura como portavoz en CiU en el Congreso, pese a la oposición de sectores de CDC verbalizada en su día por su secretario de Organización, Josep Rull