EL DETERIORO DE LAS CUENTAS PÚBLICAS

El déficit del Estado se dispara el 20% y llega al 2,66% del PIB hasta julio

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda / periodico

ROSA MARÍA SÁNCHEZ / MADRID

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El déficit del Estado se ha disparado en los siete primeros meses del año, hasta alcanzar los 29.842 millones de euros, una cifra casi el 20% superior a la del mismo periodo del año anterior, que equivale al 2,66% del PIB y que desborda con creces el objetivo inicial para el conjunto del año, del 1,8% del PIB.

Tan mal dato del déficit público ha sido difundido por el Ministerio de Hacienda ya avanzada la tarde del miércoles, cuando la sesión de investidura de Mariano Rajoy estaba llegando al final en el Congreso de los Diputados y ya habían terminado de intervenir todos los portavoces de la oposición. Así, el mal dato sobre las finanzas públicas no ha podido ser incorporado en el debate parlamentario. 

DESPLOME DE LOS INGRESOS

En términos de Contabilidad Nacional, los ingresos no financieros del Estado hasta julio han ascendido a 94.194 millones de euros, frente a los 101.124 millones del año anterior. Los gastos, por su parte, se ha reducido el 1,6% hasta los 124.036 millones, de modo que el déficit ha escalado hasta los 29.842 millones, el 19,6% superior a la cifra acumulada en el mismo periodo del 2015. 

Según los datos que ha difundido este miércoles el Ministerio de Hacienda, el dato empeora en 4.895 millones el registro del mismo mes del 2015 (cuando el déficit se situó en el 2,31% del PIB) y la principal razón de ello es el hundimiento de los ingresos del Estado que, en términos de caja, son el 18,2% más bajos que los acumulados en igual periodo del año pasado después de que la recaudación por el impuesto de sociedadesimpuesto de sociedades se haya desplomado el 85,5%. La rebaja fiscal también ha hecho caer el 13% la recaudación del IRPF.

En concreto, los ingresos del impuesto sobre sociedades han pasado de 2.997 millones en 2015 a 436 millones en 2016, 2.561 millones menos,

como consecuencia, básicamente, del descenso de los pagos fraccionados en un 48,1%, debido a la reforma fiscal adoptada por el Gobierno del PP y a que el año pasado recogía el efecto de la privatización de AENA, sin correspondencia en este año.

La reforma de sociedades incluye cambios en la definición de la base imponible del impuesto, la reducción del tipo general y la desaparición de los tipos incrementados y del pago mínimo. El Gobierno en funciones de Mariano Rajoy se ha comprometido a revertir lo antes posible los cambios en el régimen de pagos fraccionados del impuesto régimen de pagos fraccionados con el fin de poder incorporar 6.000 millones de ingresos adicionales en el 2016 y tapar los agujeros del impuesto.

El Ministerio de Hacienda, sin embargo, atribuye el mal dato del déficit hasta julio a la liquidación del sistema de financiación autonómica correspondiente al 2014, ya que la cantidad a favor de las comunidades ha sido este año 6.913 millones superior a la del mismo periodo del año pasado. 

NUEVOS OBJETIVOS DE DÉFICIT

El dato de julio confirma el deterioro que las cuentas públicas ya habían mostrado en el primer semestre del año, cuando el déficit del Estado alcanzó el 1,9% del PIB. Ya entonces, la imposibilidad evidente de cumplir los objetivos de déficit objetivos de déficit marcados el conjunto del año llevó a la Comisión Europea a flexibilizar la senda presupuestaria de España, al tiempo que dejó en cero euros la multa  la multa a la administración española por el desvío del 2015. 

En la senda presupuestaria inicial, en abril del 2016, el Gobierno había previsto un objetivo de déficit del 3,6% del PIB para el conjunto de las administraciones en el 2016 (1,8% para el Estado; 0,7% en autonomías; 0,0% en corporaciones locales y 1,1% en la Seguridad Social); el 2,9% para el 2017; el 2,2% para el 2018 y el 1,6% para el 2019.

Ante la evidente imposibilidad de que España pudiera cumplir el objetivo del 2016, la Unión Europea ratificó en los primeros días de agosto la nueva senda, más suave propuesta por la Comisión Europea en julio. La nueva senda fija ahora un objetivo de déficit del 4,6% para el 2016 (frente al 3,6% anterior), si bien aún se desconoce cómo se repartirá el punto adicional de déficit entre los distintos niveles de la administración (Estado, autonomías, corporaciones locales o Seguridad Social).