UN SÍMBOLO CONTROVERTIDO

La consulta incómoda

Más de 28.000 tortosinos están citados el 28 de mayo a un referéndum para decidir sobre el monumento franquista a la Batalla del Ebro

tortosa   monumento franquista

tortosa monumento franquista / periodico

SÍLVIA BERBÍS / TORTOSA

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“Estos piden que saquen el monumento del río, pero hay mucha gente en Tortosa que quiere que lo dejen ahí”. Un vecino intenta explicar a un turista qué pasa en la pequeña plaza frente al río Ebro. A cien metros hay un monumento inaugurado por Francisco Franco para conmemorar la Batalla del Ebro. Faltan 15 días para la consulta convocada por el ayuntamiento sobre ese símbolo que muchos tienen “naturalizado” en el paisaje y otros repudian como vestigio fascista. En esa plaza, la CUP ha desplegado un acto público para exigir la retirada inmediata del monumento sin consulta, como les instó el Parlament. Es la única formación que ha convocado un acto por una consulta diríase, para algunos, más incómoda que el propio monumento. 

“En Tortosa la mayoría de gente ‘pasa’ del monumento; solo la gente más politizada sobre asuntos de la guerra civil y la memoria histórica mantiene la llama contra él, pero son minoría”, señala un observador directo. “Por eso los partidos están incómodos, pasan de puntillas, sin entrar en el cuerpo a cuerpo”. Algunos, a costa de caer en sonoras incongruencias. Los republicanos tortosinos apoyaron la consulta, reclamando su inclusión en el pacto de estabilidad alcanzado con CiU. ERC, junto a Movem y el PSC, ha consensuado con el alcalde Ferran Bel (CiU) enunciado y respuestas. La ejecutiva nacional republicana ha cargado contra el contenido y la consulta. “El enunciado no es riguroso con la historia del monumento y plantear reinterpretarlo es una distorsión memorialista, moral e histórica”.

Más de 28.000 tortosinos pueden responder el 28 de mayo a esta pregunta: “En relación al monumento a la batalla del Ebro que inauguró el general Franco el año 1966, ¿qué cree que tiene que impulsar el Ayuntamiento de Tortosa?”.  La primera opción defiende “retirarlo y museizarlo para promover la memoria histórica y la paz”. La segunda, criticada por la ejecutiva nacional de ERC, es “mantenerlo, reinterpretarlo y contextualizarlo para promover la memoria histórica y la paz”. ERC, Movem y el PSC piden retirarlo; CiU no ha tomado parte. “No nos hemos posicionado porque dentro de nuestra formación hay gente que piensa una cosa y gente que piensa otra”, reconoce el alcalde, que contrapone su iniciativa al “postureo” de los que “con cierta hipocresía” critican y firman manifiestos, porque “durante 40 años han ninguneado la cuestión”. “Hay líneas rojas que no son consultables, como el racismo, el machismo y el fascismo”, recordó Núria Rodríguez, portavoz de la CUP Tortosa.