Buch defiende la "proporcionalidad" de los Mossos ante una "minoría violenta"

El 'conseller' Miquel Buch ha defendido este miércoles en el Parlament la "excelente labor" de los Mossos d'Esquadra en los incidentes tras la manifestación de Jusapol el 29-S y el aniversario del 1-O, cuando usaron la fuerza de forma "proporcionada" ante una "minoría violenta", aunque ha admitido dudas por la conducta de algún agente. La CUP, que ya pidió la dimisión del titular de Interior tras las cargas de aquel día, ha vuelto a ser el partido que con más fuerza ha cargado contra Buch.

En una comparecencia en el Parlament, el 'conseller' ha reconocido que el dispositivo policial de ambos días no fue "totalmente perfecto"; aunque ha subrayado que los Mossos contaron con los "medios adecuados", no se vieron "superados nunca" y ha resaltado su "gran profesionalidad" ante las "actuaciones violentas" de una "minoría radical y violenta", que esos días "emergió de nuevo" en Catalunya "tras años desaparecida".

Sobre el intento de algunos grupos de irrumpir en el Parlament en el primer aniversario del 1-O irrumpir en el Parlament , Buch ha detallado que los Mossos hicieron en primera instancia un "repliegue estratégico" en el interior del edificio para comprobar si la no-presencia policial "aminoraba" la actitud de los manifestantes y que cuando constataron que se sobrepasaban las "líneas rojas del civismo pacífico" hicieron un uso "gradual y proporcional" de la fuerza para dispersarles. 

Maria Sirvent, la encargada de responder a Buch en nombre de la CUP, le ha afeado que se refiriera a la "izquierda independentista radical". "Es muy peligroso usar esa estrategia, la misma que usa el aparato represivo del Estado español". Buch le ha replicado que si fuera por la CUP no habría policía y Sirvent le ha tildado de

"paternalista y condescendiente", exigiéndole respeto y "que no infantilice ningún proyecto político".

Pero no ha sido la única crítica con Buch. Ciutadans le ha acusado de ser demasiado permisivo con los CDR. "Los CDR deben ser una especie de nuevo 'sancta sanctorum', pero no se les puede dejar en un oasis de impunidad", ha sentenciado Matías Alonso, que ha querido recordar que "no existe el derecho de contramanifestación, como se está haciendo en los últimos tiempos". Montserrat Fornells, diputada de ERC, ha calificado a Jusapol de "brazo armado de Ciutadans"."La manifestación de Jusapol es una estrategia más de Ciutadans para que haya violencia en Catalunya", ha afirmado. Los 'comuns' también coinciden en considerar el homenaje de los policías que intentaron impedir en el referéndum una "provocación. "Estas provocaciones continuarán y estos grupos quieren ocupar nuestras calles (...). Prepare a su departamento por estas provocaciones", le ha advertido Joan Josep Nuet, que ha lamentado también la "falta de profesionalidad" en la preparación del dispositivo.

El reto de los CDR

El socialista Carles Castillo le ha echado en cara la falta de "autocrítica" y le ha trasladado su preocupación por "la desmotivación de la plantilla y por el uso político del cuerpo de Mossos". Por su parte Alejandro Fernández se ha mostrado sorprendido por la "metamorfosis" de Buch que, según el nuevo hombre fuerte de los populares, ha pasado de "preadolescente a hombre de orden". Mientras que Fernández le acusaba de ser un "tifoso de los CDR", la cuenta de los comités retaba a Buch desde su cuenta de Twitter. "Buch, ¡no nos das miedo! Tu miedo es un insulto a todas aquellas que hemos defendido, en pie de paz, la democracia". Un mensaje que han acompañado con el 'hashtag' #BuchNosVemoselViernes, en alusión al escrache que han preparado ante las sedes del PDECat y ERC para volver a reclamar a los partidos de Govern "República o dimisión".