El Black Friday de los partidos políticos

Lo están dando. Lo están regalando. Ha llegado el 'Black Friday' de la política: este viernes empieza la quincena fantástica de la política, un camino hacia las elecciones generales del 20-D en el que todos los partidos prometen el oro y el moro con el objetivo de convencer al votante. Junto a las ofertas más jugosas económicamente conviven también las más variopintas. Lo importante es persuadir al elector para que compre. En los escaparates de los programas electorales cabe de todo, pero mucho ojo con la publicidad engañosa porque si no se cumplen las promesas no se permite la devolución hasta dentro de cuatro años. 

El PP vuelca sus ofertas más arriesgadas en la cuestión económica. Los populares alardean de su gestión para salir de la crisis y prometen un futuro con más trabajo y menos impuestos. Todo ello trufado de una serie de promesas en otros ámbitos que dejarían pequeña la expresión de Estado del bienestar.

Empleo para todos. El PP se compromete a crear 500.000 puestos de trabajo al año para llegar al '20-20', es decir, 20 millones de empleos en el 2020. También a crear un "instituto nacional del talento del empleo". Nada, que quien no trabaje sea porque no quiere.

Menos presión (fiscal) que la del Madrid. Ventajas en los planes de pensionesplanes de pensiones, congelar parte de la factura de la luz, rebajar las cotizaciones, reducciones de impuestos para las familias... "[El PSOE] va a subir hasta el IVA de los chuches", se quejó Mariano Rajoy hace años. Después fue él quien lo subió todo. Ahora dice que quiere bajarlo.

¿Corrup... qué? Aquellos Bárcenas traen estas promesas. “Exigiremos responsabilidad de los que son o han sido cargos públicos de nuestro partido”, sostienen los populares en su programa. El PP asegura que aumentará los medios y las reformas legales para “garantizar que quien la hace la paga, incluso con su patrimonio”.

Allá vamos, ciberespacio. Hasta en el papel se fija el PP. El partido de Mariano Rajoy alardea de situar a España como quinto país en el uso de la administración electrónica e incluso utiliza el lema 'en enero, papel cero'. Otro reto que se marca es universalizar la cobertura de la telefonía móvil 4G y generalizar el uso de internet "a velocidad ultrarrápida". ¡Despegamos!

Viajar es un placer. El PP se fija el objetivo de alcanzar "0 víctimas (en accidentes de tráfico" en el 2020". ¿Cómo? "Trabajando en la concienciación y la mejora de infraestructuras". Ojo, y una propuesta que agradará a los ecologistas: "Fomentaremos el uso de la bicicleta".

Con la promesa de rehacer lo destruido por el PP, el PSOE ha hecho un larguísimo programa en el que hay de todo, como en botica. Pensando en los más jóvenes promueve la producción de videojuegos y el abrir el debate sobre los porros.

Basta de timos tecnológicos. ¿Harto de que tu ordenador o móvil se escacharra justo cuando se te ha terminado la garantía? No es casualidad. Muchas empresas lo programan como si de bombas de precisión se tratara. Por eso los socialistas se comprometen a prohibir y penalizar de forma estricta las prácticas de obsolescencia tecnológica forzada de los productos por parte de las empresas. Y, también, el cumplimiento de las obligaciones contractuales de cobertura, velocidad y calidad de la banda ancha.

Cultura a precio de porno. Bajar el IVA cultural al precio del porno. Esa será una de las primeras de Pedro Sánchez si llega al Gobierno. La propuesta plantea el inmediato establecimiento del IVA cultural al tipo reducido 10% y la solicitud de autorización de la UE a España para el tipo súper reducido al 4%. No solo esto. Si no que se creará un sorteo de Lotería Nacional destinado específicamente a la financiación del cine y otras industrias culturales.

Renta mínima vital. La propuesta estrella en materia social pasa por una renta que va de los 426 a los 708 euros mensuales, más un máximo de 150 euros por hijo a cargo, que podría ir a 730.000 familias. Además, se ofrece un bonus de cotización de dos años a las mujeres por cada hijo a efecto de cálculo de pensiones.

Dios paga como los mortales. Se ha acabado el trato de favor para la Iglesia. El PSOE se compromete a denunciar los Acuerdos de España con la Santa Sede, a que pague como todo el mundo por los bienes que no estén afectos a uso de culto o social y a crear "cementerios públicos no confesionales".

El de Ciudadanos es uno de los programas más extensos. Toca todos los palos y no deja títere con cabeza en muchas instituciones. Para poder aplicar todo su programa que se preparen las 24 horas del día porque hay que exprimirlas hasta el último segundo. 

La escoba institucional. Suprimir el Consejo General del Poder Judicial, las diputaciones, el Senado, fusionar municipios, los aforamientos de los políticos... Esto no es un 3x2, esto es mucho más.

Esto es vida. Asegurar un sistema de ingresos mínimos que permita tener una vida digna y que mantenga a las personas activas en la búsqueda de un empleo. Aumentar las residencias para mayores. Un complemento salarial anual garantizado concentrado para asegurar que todos reciben un salario digno y que no les desincentiva para trabajar.

Es país para autónomos. Los 'naranjas' saben que tienen ahí un filón. Por eso tratan de convencer al personal proponiendo la reducción a 50 euros la cuota de autónomos el primer año y aplicando una cuota variable el segundo en función de los beneficios. En cuanto a los autónomos que ingresen por debajo de salario mínimo, se les ofrece el alta gratuita y la eliminación de la cuota mensual a la Seguridad Social.

El liberalismo va a llegar. Ciudadanos plantea rebajar el IRPF en todos sus tramos, reducir el IVA y eliminar el impuesto de sucesiones para las clases medias. A la vez, bajarían el IVA de las entradas de cines, museos y teatros del 21% actual hasta el 7% gracias al ahorro de 50 millones que supondría para las arcas públicas cerrar el Senado.

Niño, no rayes el libro. Los de Albert Rivera proponen que los colegios compren los libros de texto y que los niños los usen en préstamo durante el año, con el compromiso de no subrayar ni escribir en ellos con bolígrafo, ni romperlos, y de tratarlos con máximo cuidado. Al final del año se produce la devolución del libro por los niños junto con una inspección por el colegio de forma que los padres tengan que hacer frente al pago de los libros si estas condiciones no se han cumplido.

Escuchitas escuchitas no es de mala educación. Ciutadans quiere "proteger a los chivatos ('whistleblowers') dispuestos a ayudar proveyendo información en la lucha contra la corrupción".

El programa de Podemos es el que más chollos ofrece. Aunque, a diferencia de las europeas, ya no habla de limitar el salario máximo o del impago de la deuda, plantea una auténtica revolución con ofertas de todo tipo, que igual legaliza los referéndums que los porros.

Infancia sin deberes. Aunque todavía no puedan votar, Podemos es el adalid de los más pequeños, a los que quiere liberar del yugo de los deberes. "Después de seis horas de jornada laboral-escolar", aseguran, no puede ser que sigan hasta las 10 horas. Si ganan se comprometen a que los niños puedan dedicar este tiempo a "distintas formas de aprender: jugando, imaginando, creando, dibujando".

Legalizar el cannabis. Al ritmo de la canción de Ska-p, Podemos canta a la "legalización". Apuestan por relajar las leyes y despenalizar la producción, distribución y consumo de cannabis, normalizando las actividades de los clubes sociales.

Sin discriminación alimentaria. Podemos están en contra de toda forma de discriminación: por raza, religión, condición sexual... y alimentaria. "Combatiremos la discriminación laboral y escolar, tanto en el ámbito público como en el privado, de las personas que sufren enfermedades que tienen un tratamiento eficaz, como celíacos y diabéticos".

El fin de la austeridad. Crear 300.000 ermpleos en un año, subir hasta 950 el salario mínimo, bajar el IVA y una jornada laboral máxima de 35 horas semanales son solo algunos de los puntos de la propuesta económica que solo reserva austeridad para los cargos públicos, como el presidente que pasaría a cobrar 1800 euros mensuales.

Democràcia i Llibertat, la marca con la que Convergència concurrirá a las elecciones, tira por elevación en su programa. Después de un exhaustivo repaso a los "agravios" del Estado español, la lista soberanista que encabeza Francesc Homs apunta las medidas que aplicaría durante la transición hacia el "Estado propio".

Estado del bienestar 2.0. La fuerza independentista promete incrementar el salario mínimo hasta situarlo cerca de los 1.000 euros, aboga por ampliar la deducción por maternidad y se fija como objetivo una prestación universal por menores de 18 años a cargo. También propone rebajar el IRPF por hijos a cargo. Es decir, no solo recuperar lo que CiU recortó, sino corregirlo y aumentarlo. 

'Som i serem (millors)'. La inmersión lingüística, intocable. La ‘ley Wert’, fuera. Algunas propuestas: universalizar la educación hasta los 18 años, reclamar al Estado más dinero para la enseñanza de 0 a 3 años y aumentar la dotación y el número de becas universitarias. Ni Finlandia, oiga.

Cultura y deporte. Los soberanistas pedirán la supresión del Ministerio de Cultura, la devolución completa de los 'papeles de Salamanca' y el reconocimiento de la unidad lingüística del catalán en los 'Països Catalans'. También defienden un IVA superreducido en productos culturales y en las entidades y actividades deportivas. En esta última área, además, trabajarán por que el Comité Olímpico Catalán se integre en el COI.

Limpios como una patena. A este tema dedican los soberanistas las últimas tres páginas de su programa. Destacan entre sus promesas un mayor control de los lobis, la revisión y limitación de los aforamientos de los políticos y la modificación legislativa para “garantizar una financiación transparente de los partidos y sus fundaciones”. Hay institucionalizar el reconocimiento de las redes sociales como canal de participación ciudadana".

Se podría decir que ERC pasaba por allí. Afirman los republicanos que este será su último programa electoral para unas elecciones españolas y todo lo que plantean es ya para la futura "república catalana". No prometen helado de postre todos los días, pero casi.

Soberanos de todas todas. Gabriel Rufián y los suyos ya no piensan en transiciones. Irán al Congreso a "explicar al Estado y al mundo que Catalunya ya ha empezado a constituirse como república".

El Baix Llobregat, casi como Londres. La independencia, pronostican los republicanos, transformará el área metropolitana de Barcelona de tal manera que las localidades del frente del Besòs, el Barcelonès y el Baix Llobregat se erigirán en la "cuarta aglomeración urbana más importante de Europa, por detrás de Londres, París y Madrid".

'Països Catalans' de pleno derecho. Primos y hermanos. ERC asegura que la secesión comportará "el reconocimiento del derecho de los habitantes del resto de territorios de los 'Països Catalans' a añadir la nacionalidad catalana a la española si lo desean". Asegura además que la independencia contribuirá al progreso de España porque dejará atrás rémoras que la atenazan. El problema catalán ya no será excusa y todos juntos iremos de la mano a la UE a defender los intereses de la península Ibérica. 'Germanor total'.

Una Catalunya rica y plena. Los republicanos atisban un país en lo más alto. Prometen que se incrementará progresivamente la inversión en políticas sociales desde el 22,8% actual hasta el 30% del PIB. Ello irá acompañado de un aumento progresivo del salario mínimo hasta los 1.000 euros. ¿Quién da más?