HOJA DE RUTA

La ANC pide un Govern que no obedezca a España

La entidad exige la implementación de la ley de transitoriedad y que el nuevo Ejecutivo controle la hacienda catalana, el poder judicial y la seguridad

Agustí Alcoberro, vicepresidente de la ANC, comparece ante los medios.

Agustí Alcoberro, vicepresidente de la ANC, comparece ante los medios. / periodico

Júlia Regué

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Mientras varios dirigentes independentistas se sinceran sobre la declaración unilateral de independencia (DUI) y rechazan que tuviera otro objetivo que el "simbolismo", la Assemblea Nacional Catalana (ANC) da la "república catalana" por "proclamada" desde el pasado 27 de octubre. En su hoja de ruta a dos años vista, que se someterá este domingo a votación, la entidad soberanista insta al futuro Govern de la Generalitat a "tomar medidas para construir la república" y le pide que "ejecute normas y decretos que supongan avanzar hacia su implantación" e incluso "acordar los plazos de separación con el Estado".

"El Estado español ha vulnerado impunemente los derechos humanos y los derechos de los pueblos, y por lo tanto, ha perdido toda la legitimidad en Catalunya", asevera el texto inicial de la entidad, sobre el que se han presentado 119 enmiendas, dos de ellas a la totalidad. Decidida a avanzar hacia el "proceso constituyente" de Catalunya, que ve "seriamente frenado" tras el 1-O, la ANC exige la implementación de la ley de transitoriedad y que el nuevo Ejecutivo catalán tome un "poder efectivo y no dependiente del Estado español" en lo que atañe a la "financiación y control de la hacienda catalana", al "poder judicial y la fiscalía" y a la "seguridad de los catalanes". 

Asimismo, la Assemblea quiere poner en marcha debates sobre la construcción de un nuevo Estado y vislumbra, esta vez sin fijar plazos, que el Ejecutivo debe convocar elecciones constituyentes, confeccionar la Constitución catalana y organizar un referéndum para ratificarla.

Agrio apoyo a los partidos independentistas

Si de un lado llaman al "empoderamiento ciudadano" para no dejar el 'procés' en manos de las instituciones y avanzar en la creación de "estructuras de Estado", de otro apelan a la "unidad de acción" entre fuerzas políticas y organizaciones de la sociedad civil. La ANC hace hincapié en que los partidos independentistas "mantienen las limitaciones y debilidades que el marco autonómico al que pertenecen les impone" pero les requieren ser el "instrumento de acción política en el Parlament y en el Congreso" para culminar el proceso soberanista. 

En el escrito, la ANC evita posicionarse sobre las negociaciones de investidura y sobre cómo "restituir el Govern legítimo". Eso sí, sus dirigentes aseguran "haberse visto obligados a pasar por unas elecciones ilegítimas", una cita electoral que bautizan como "un nuevo plebiscito unilateral organizado por el mismo Estado español con la clara intención de hacerse suyo el Parlament y el Govern" y denuncian una "campaña sucia con apoyos a propuestas unionistas y trabas a los independentistas".

Movilización y "escalada judicial"

La entidad también avisa de que "mantendrá e intensificará" la movilización en las calles "de forma no violenta" hasta que se consigan sus propósitos: la excarcelación de los "presos políticos", el regreso de los "exiliados", el "cierre" de los procesos judiciales abiertos por el 'procés' y el "reconocimiento efectivo y legítimo" de la república catalana. Y no esconde el temor a una nueva aplicación del 155: "No se pueda volver a aplicar ni políticamente, ni socialmente, ni operativamente", censuran.

Por primera vez, la organización plantea responder con una "escalada judicial" las causas abiertas contra independentistas por el 'procés', contactando con otras entidades para denunciar a instancias internacionales los "ataques recibidos del Estado español".

Los socios tendrán este domingo la última palabra sobre la hoja de ruta. Después, deberán convocar elecciones al secretariado nacional y renovar la mitad de la dirección, que se ha visto envuelta en numerosos cambios debido al encarcelamiento de su ahora expresidente Jordi Sànchez y al abandono de parte de la cúpula para concurrir a listas electorales del 21-D.