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Vodevil para expertos en el Banco de España

Edificio del Banco de España, en Madrid.

Edificio del Banco de España, en Madrid. / ARCHIVO / AGUSTÍN CATALÁN

JESÚS RIVASÉS

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Fernando Restoy (Madrid, 1961), subgobernador deL Banco de España, dejará su cargo voluntaria y anticipadamente en enero, año y medio antes de que expire su mandato (junio 2012-junio 2018). Abandona su despacho con vistas a la Cibeles, en Madrid, para presidir el Instituto de Estabilidad Financiera, en Basilea, dependiente del Banco Internacional de Pagos. La marcha de Restoy, que no quería dejar pasar la oportunidad que le surgía y que prefiere buscar nuevos aires -quizá menos enrarecidos-, obliga a buscar un sustituto para el puesto de número dos del Banco de España y ahí empiezan los líos.

La ley de autonomía del Banco de España determina que el Rey nombra al Gobernador del Banco de España, a propuesta del Gobierno, por un periodo de seis años y que no puede ser removido ni reelegido para un segundo mandato. La norma especifica que el Gobierno nombra al Subgobernador a propuesta del Gobernador, ahora Luis Linde. Esa ley, que garantiza la independencia -si la quieren ejercer- a los órganos rectores con respecto al Gobierno de turno, ha sido interpretada con flexibilidad desde los años 90 del siglo XX. PP y PSOE, según quien estaba en la Moncloa cuando correspondía nombrar al Gobernador y Subgobernador, pactaban los nombres. El Gobierno elegía al Gobernador y la oposición al Subgobernador. La norma, no escrita, se rompió en tiempos de Zapatero, que designó Gobernador a Miguel Ángel Fernández Ordóñez, pero no pactó su segundo. Todo volvió a su cauce en junio de 2012. Rajoy y Guindos propusieron a Luis Linde como  Gobernador y el PSOE a Restoy para número dos.

La marcha anticipada de Restoy ha complicado las cosas. Luis de Guindos, que habla con Pedro Saura y Valeriano Gómez, del PSOE, aceptaría alguna propuesta de los socialistas que, sin embargo, preferirían que todo ocurriera con su visto bueno, pero sin mucha parafernalia, porque descartan todo lo suene a pactar con el PP. Sebastián Albella, por ejemplo, preside la CNMV con el rechazo del PSOE, que se opuso con munición prestada por el PP. Además, aunque sería discutible el periodo de su mandato, lo deseable es que el nuevo Subgobernador deje el cargo en junio del 2018, cuando cese el actual Gobernador, Luis Linde, y entonces Gobierno y oposición negocien sin tapujos ambos relevos.

Dos directores generales del Banco de España emergen como  candidatos idóneos para sustituir a Restoy. Julio Durán (Madrid, 1951), encargado de Estabilidad Financiera y Resolución y Javier Alonso (Logroño, 1951), responsable de Operaciones Mercados y Sistemas de Pago. Ambos tienen 65 años y para ellos ser Subgobernador del Banco de España sería un broche de oro a su carrera, por lo que aceptarían dejar el puesto en junio de 2018, cuando también se vaya Linde. Y entre ellos, Alonso quizá es más próximo a unos socialistas que no pactan con el PP y que no quieren que lo parezca, pero que hablan con Guindos. Podría ser una tragicomedia, pero se queda en el vodevil del Banco de España.