Una princesa que no hace presupuestos

Belén Esteban es una buena chica de barrio que estuvo a punto de cumplir su sueño de Blancanieves y acabó de madre soltera teniendo una hija con el torero Jesulín. Poco sabríamos de ella si el boom de la televisión rosa no la hubiera convertido en una de sus estrellas principales, especialmente desde el momento en que Tele 5 tomó la opción de hacer frente a la fragmentación de las audiencias con la reiteración de los mismos personajes y de los mismos temas a lo largo de toda su parrilla.

Hasta aquí nada nuevo bajo el sol: una cadena comercial explotando a una chica que ha encontrado en la televisión el amor y la felicidad que el torero le negó. Mucha audiencia acumulada, muchos grp's vendidos y una buena retribución para Belén y para su Andreíta. Esta semana, Tele 5 ha dado un paso más. Ha querido jugar a la política con Belén Esteban. Previamente había preparado el terreno llevando a los políticos a los escenarios habituales de la «princesa del pueblo». La presencia de José Blanco, Tomás Gómez, José Montilla, Artur Mas y hoy mismo de Cándido Méndez en La noria no ha hecho más que actuar de prólogo para envolver a la Esteban con los atributos habituales de la información política: encuestas, programa de gobierno, debates... Eso sí, sin mojarse haciendo un presupuesto. Una parodia, sí. Pero una parodia cargada con munición real si el disparo viene de una empresa de Berlusconi.

Operación de alcance

Podríamos estar ante una operación que va mucho más allá de lo comercial con unos efectos mucho más perniciosos que la simple banalización de la política. Se trata de un órdago al sistema que los partidos políticos deberían combatir con algo más que las clásicas apelaciones a la regeneración o el fuego cruzado para ver quién es más cómplice del pecador. La construcción del embuste no pretende lógicamente llevar a Belén Esteban a la Moncloa, sino abrir paso a cualquier otro tipo de propuesta populista que beba de sus mismos presupuestos y que se cimente en los escombros que deja a su paso. ¿Estará pensando Tele 5 en la inefable Rosa Díez?