La rueda

Sobre lenguas oficiales

El idioma no es un elemento determinante para que un ciudadano se una al independentismo

ANDREU PUJOL MAS

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No creo que sea un buen momento para tratar el asunto de la oficialidad de lenguas en una Catalunya independiente. Hablar de eso ahora solo sirve para imponerse una serie de apriorismos absurdos cara a un futuro proceso constituyente. Creo que este no es un elemento determinante en la gran mayoría de los ciudadanos a la hora de defender o desestimar la creación de una república catalana. Ante la oportunidad de poder mantener con los propios recursos un Estado del bienestar en condiciones y ante la posibilidad de gobernarse según las propias convicciones y necesidades, solo desde una irracionalidad marcada por el nacionalismo español se convertiría la oficialidad de la lengua castellana en casus belli.

Los sectores más favorecidos por echar ahora leña al fuego en la cuestión lingüística son los que ya tienen decidido su voto contrario a la independencia desde hace mucho tiempo, es decir, los que no quieren que se llegue a debatir seriamente sobre lengua ni sobre nada que escape a la actual situación de sumisión a los dictados del Estado. Como tampoco quieren que lo hagamos en lo que afecta a las necesidades básicas de las personas –hablen el idioma que hablen–, ya sea la pobreza energética o el déficit fiscal que nos azota y que tiene consecuencias visibles en nuestro día a día.

El manifiesto del grupo Koiné defendiendo la oficialidad única del catalán ni es «talibán» ni es «racista» ni ningún otro de los sambenitos que se le han atribuido: no se me ocurre nada más contrario al racismo que la preocupación sincera por la supervivencia de una lengua minorizada. Pienso en la trayectoria de alguno de sus impulsores, como Joan Pere Le Bihan, que cuando vivía en Occitania luchó firmemente en la defensa de los trabajadores marroquís y tunecinos sin papeles. El manifiesto, si le debemos atribuir algún adjetivo, posiblemente sea inoportuno, pero no más que las manifestaciones en sentido contrario sobre el mismo tema.