Tú y yo somos tres

Reyes, premios, y pitos

FERRAN MONEGAL

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Hemos seguido en casa, en directo, por La 2 de TVE, la gala de premios de la Fundación Princesa de Girona. Como espectáculo televisivo ha sido un tostón. Dos horas seguidas de tele necesitaban un buen director escénico que diseñase algo visualmente más atractivo. A los 40 minutos de haber comenzado el evento apareció  Juan Carlos Ortega. Nos despertamos enseguida. Nos hizo una de las suyas. Tuvimos una alegría. Enchufó un teléfono móvil a un ejemplar de Los hermanos Karamazov y le salía una telefonista que le iba pasando por distintas páginas del libro. Ortega buscaba a Dimitri Karamazov. Pero le salían páginas dedicadas a descripciones de paisajes de la estepa rusa. O se que no pudo hablar con Dimitri, Pero los cinco minutos que duró el sketch fueron muy entretenidos. Los únicos. Tuvimos que esperar hasta el final para encontrar otro punto emotivo, cuando Luz Rello, Silvia Osuna, Andrés Salado, Elena Medel Sergio Álvarez fueron a recoger sus premios. Juventud, y extraordinario talento, reunidos.

    Bien, ya hemos conocido la noticia. Ahora conozcamos la verdad, como suele decir Wyoming. En esta emisión de TVE, las cámaras de La 2 se cuidaron mucho de no enfocar la llegada de los Reyes al recinto. Ni tampoco su salida. En el Telediario de las 21 horas, menos aún: nada vimos de su entrada, ni de su salida del Palacio de Congresos. ¡Ah! Tuvimos que ir al TNvespre (TV-3) para enterarnos de la protesta que ocurrió allí mismo. «¡Visita del Rey a Girona con polémica! / ¡Manifestación convocada por la CUP!», nos advertían. Y en efecto las cámaras de TV-3 nos ofrecieron planos de los manifestantes, de sus protestas, y de sus pitos. Hombre, hay que celebrar que TV-3 nos enseñe lo que ocurre. Felicitemos a la tele de Sant Joan Despí. Esta vez no ha hecho lo que hacía cuando escondía la realidad de los manifestantes que pitaban y protestaban contra Pujol cuando iba a declarar al Parlament, o cuando entraba o salía de su domicilio. ¡Ah! Llámenme ingenuo, pero parece que hay brotes de progreso en materia informativa.

BALEARIA.– La noticia de que Pedro Horrach deja la fiscalía y se pasa a la abogacía privada, en casa no nos ha sorprendido. Es un cambio natural: con el caso de la infanta lleva meses entrenándose como abogado defensor. La pincelada punzante la puso Dani Mateo en El intermedio. Dijo: «Un empleo ideal para él sería el de jefe de la Casa Real». Oportuno.