El Papa que viene

No todos los papas son iguales. El Papa que llega hoy a Barcelona es un intelectual bávaro. Un teólogo que en su juventud fue una de las voces avanzadas del concilio Vaticano II junto a su amigoHans Küng. Un obispo que en su madurez sintió el pánico con la secularización y se convirtió en elpanzercardenaldeJuan Pablo II. Joseph Ratzingerabrazó el gobierno de la Iglesia de la mano de los sectores que se hicieron fuertes durante el mandato del Papa polaco. Pero en estos cinco años no ha sido un simple continuador deWojtyla. La ruptura más abrupta ha sido, sin duda, en el tema de las denuncias por pederastia, donde ha proclamado la «tolerancia cero» después de intervenir ni más ni menos que a los Legionarios de Cristo, una de las órdenes mimadas porJuan Pablo II.

Debate cultural

Benedicto XVI ha desplazado el centro del debate católico con el mundo actual. Donde antes se había planteado un debate moral sobre las conductas, él ha levantado una cruzada intelectual sobre la cultura de hoy y la filosofía del siglo XXI.

Seguramente, en los extremos de nuestra sociedad plural, a una minoría le da igual cómo sea el Papa porque no le va gustar ninguno. Y a otra tampoco le importa porque le van a gustar todos. Entre ambos extremos están los partidarios del diálogo, la inmensa mayoría aunque sea silenciosa. Los que entienden la dimensión religiosa del ser humano aunque no la compartan. Los que tienen una experiencia trascendente que no es cristiana. Los que se sienten vinculados culturalmente al catolicismo pero alejados de su actual estructura. A todos ellos no les da igual un Papa que otro.

Benedicto XVI será un Papa de transición. Como lo fuePablo VI. Son perfiles de reflexión frente a los torbellinos que fueronJuan XXIIIyJuan Pablo II, aunque fuera en sentidos opuestos. Muchos hombres y mujeres de buena voluntad, muchos creyentes no católicos y, sobre todo, muchos católicos esperan que le suceda otroJuan XXIII, capaz de dialogar con el mundo sin condenarlo y de poner los derechos humanos como prioridad.