ANÁLISIS

La oportunidad de Europa

Entre las opciones que barajan los socialistas para ganar peso en Europa de cara a las elecciones de mayo está la de presentar a Borrell o echar mano de Nadia Calviño

El ministro de Exteriores, Josep Borrell, junto a javier Solana, durante un almuerzo informativo esta mañana en Madrid.

El ministro de Exteriores, Josep Borrell, junto a javier Solana, durante un almuerzo informativo esta mañana en Madrid. / .45087243

Olga Grau

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Europa está en la agenda más que nunca con el auge de los populismos, la cicatriz del ‘brexit’ y las amenazas de Donald Trump. Las elecciones europeas de mayo serán un pulso en toda regla entre los populistas y los defensores de más integración. Por eso, por primera vez los comicios europeos tendrán un protagonismo genuino.

En este contexto, el socialismo español, de momento en el Gobierno, debería estar diseñando su estrategia en las elecciones europeas, cita que debería servir para recuperar el peso de España perdido en las instituciones europeas y que encarnaron en su día Javier Solana o Joaquín Almunia. La oportunidad casa con la voluntad de Sánchez de forjarse un perfil europeo frente a la minoría de escaños dentro de su propio país.

El baile de candidaturas para la presidencia de la Comisión Europea ya ha empezado en el lado de los populares europeos con la presentación de la candidatura del bávaro Manfred Weber Manfred Weberpara ocupar el puesto de Jean-Claude Juncker en Bruselas, a la que se ha sumado también la del exprimer ministro finlandés y exeurodiputado Alex Stubb. El francés Michel Barnier, actual negociador europeo para el 'brexit', se ha autodescartado.

Por parte de los socialistas todavía no hay movimientos de fichas. Y ahí es donde el Gobierno español deberá trabajar si quiere optar a la presidencia de la Comisión Europea, a la alta representación  de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, que ostenta ahora Federica Mogherini, o a algunas de las comisarías importantes que se perdieron definitivamente durante el Gobierno del PP.

Entre las opciones que se estudian estaría la de presentar a Josep Borrell como candidato a la presidencia de la Comisión Europea o a la Alta representación. Otra opción pasaría por echar mano de otra gran baza europea en el Ejecutivo, que es la de la ministra de Economía Nadia Calviño, cuya carrera ha transcurrido al más alto nivel en Europa.

Si los populares logran hacerse con la presidencia comunitaria, el segundo mayor cargo en importancia podría ir a parar a la familia socialista europea. El Ejecutivo de Sánchez deberá decidir pronto qué fichas mueve y en qué plazos dentro de un contexto cada vez menos descartable que es el de adelanto electoral en España. Sería una lástima que el país perdiera de nuevo el tren de Europa por inacción, incompetencia o crisis políticas internas. Europa no espera.