¡Eterno Capi!

Raúl Tamudo ha colgado las botas. El ídolo de Sarrià, Montjuic y Cornellà-El Prat, el 23, que durante tantas tardes y noches de fútbol ha hecho gozar la familia blanquiazul, pone así punto y final a una trayectoria profesional de 23 años, siendo, a día de hoy, el futbolista catalán que más goles ha anotado en su carrera futbolística y el segundo nacional de la Liga española. Porque sí, por los que no se pagan tantos millones, a los que no se les da la condición de estrella mundial, también son capaces de batir récords importantes.

Una cualidad especial y una personalidad muy propia le ha hecho ganarse el cariño de una afición, la del RCD Espanyol, que nunca olvidará a su eterno capitán -título que comparte con el estimado Dani Jarque-.

Después de cinco años desde que dejó los colores blanquiazules, aquel 8 de mayo de 2010 ante el Osasuna, Tamudo ha vuelto pocas veces a su casa. Tal vez es el momento de rendirle el homenaje que realmente se merece, como se le rindió aquel día, y de ofrecerle la posibilidad de incorporarse a la estructura del club. En nuestra pequeña gran familia, todos somos importantes, pero él tiene una importancia especial.

Siempre se ha dicho que la del Espanyol es la fuerza de un sentimiento. Ser pocos nos hace mas especiales, nos recordaba cada partido en Montjuic el anuncio del periódico La Grada. Con mucho acierto, la junta actual presidida por Joan Collet nos ha rebautizado como la 'Meravellosa Minoria'. Pocos, pero especiales. Y esenciales.