El peor esquiador del mundo

Adrián Solano protagonizó la prueba más torpe del Mundial de esquí

Adrián Solano protagonizó la prueba más torpe del Mundial de esquí / periodico

JUANCHO DUMALL

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El venezolano Adríán SolanoAdríán Solano nunca había pisado la nieve, pero eso no le impidió inscribirse para participar en el Campeonato Mundial de Esquí Nórdico que estos días se celebra en Lahti (Finlandia). Había trabajado de cocinero en su país para ahorrar dinero, había entrenado en seco con rollerskis (esquí sobre ruedas) y confiaba en mejorar su rendimiento practicando sobre nieve un mes en Suecia. Era un propósito descabellado, pero al que tenía derecho, puesto que la organización del mundial había admitido su inscripción por la cuota que correspondía a su país.

Las dificultades no le llegaron, en principio, por el lado deportivo. Solano fue interceptado en el aeropuerto de París, donde hacía escala camino de Suecia. Los gendarmes franceses no se creyeron que aquel chico fuera un esquiador, sino que trataba de entrar ilegalmente en la Unión Europea. Fue deportado.

El aspirante a esquiador no se desmoralizó. Lo intentó de nuevo, esta vez vía Madrid, y pudo llegar a Suecia. Perdió mucho tiempo de entrenamiento, pero al final se presentó en la línea de salida en Finlandia para disputar la prueba de 10 kilómetros. Fue un desastre. No paró de caerse, rompió un bastón, se salió del recorrido marcado y fue descalificado. Pero al final se mostraba feliz. Había cumplido un sueño.

A diferencia de la del equipo jamaicano de bobsleigh en los juegos de Calgary de 1988 (inmortalizado en la película 'Elegidos para el triunfo'), la historia de Solano fue más cómica que épica. Ni siquiera tuvo el calor que el público le dispensó en Sidney-2000 al nadador ecuatoguineano Éric Moussambani en su agónica participación en los cien metros libres.

ESPERPENTO

Pero si la participación del atleta fue un esperpento en el campo deportivo, algo parecido podemos decir de la actuación abusiva de las autoridades francesas, que dieron pie a una protesta oficial del Gobierno de Nicolás Maduro. Francia sacó lo peor de su institnto antiinmigrantes, y el Gobierno de Caracas pudo sacar pecho, en su línea habitual, hablando de la "afrenta contra un deportista venezolano". Al final, un episodio lamentable.