EN CLAVE EUROPEA

Paraísos fiscales hasta en la Unión Europea

Jean-Claude Juncker y Joseph Muscat

Jean-Claude Juncker y Joseph Muscat / periodico

Eliseo Oliveras

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Los 'papeles del paraíso' evidencian que la elusión tributaria y la evasión fiscal organizada siguen constituyendo un grave problema político, social y económico en la Unión Europea (UE) y que muchos de sus estados miembros siguen actuando de facto como paraísos fiscales, pese a las sucesivas promesas de los líderes europeos.

En el 2009, tras el compromiso del Grupo de los 20 países industrializados y emergentes y el plan de acción de la OCDE, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, afirmó: "los paraísos fiscales se han acabado". Ocho años después, los paraísos fiscales están más fuertes que nunca, como confirman las sucesivas filtraciones: 'Offshore Leaks' (2013), 'China Leaks' (2014), 'Luxembourg Leaks' (2014), 'Swiss Leaks' (2015), los 'papeles de Panamá' (2016), 'Bahamas Leaks and Money Island' (2017), 'Malta Files' (2017) y, ahora, estos 'papeles del paraíso'. Las medidas adoptadas hasta el momento por la UE son más cosméticas que efectivas, según Oxfam y Global Witness. El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, reconoce que la evasión fiscal organizada "es insoportable" y que "queda mucho por hacer".

22 billones

Más del 40% de los beneficios de las multinacionales se desvían artificialmente a paraísos fiscales, destaca el economista Gabriel Zucman. La pérdida de recaudación a nivel mundial asciende a más de 350.000 millones de euros anuales, de los que 120.000 millones corresponden a la UE, indica Zucman. Un estudio de Alex Cobham y Pert Jansky para Naciones Unidas cifró en marzo la pérdida de recaudación solo en el impuesto de sociedades en 430.000 millones anuales a nivel mundial.

Tax Justice estima que los fondos, inversiones financieras y patrimonios ocultos a través de paraísos fiscales ascienden a 22 billones a nivel mundial (22 veces el producto interior bruto anual de España). El 25% de los beneficios de los 20 mayores bancos europeos proceden de paraísos fiscales, precisa Oxfam.

Las inmensas pérdidas de recaudación de ese entramado de elusión fiscal impiden el nivel de inversiones públicas y gasto social que requeriría la UE para mantener un crecimiento económico elevado y una cohesión social adecuada. Esa recaudación perdida conduce cada año a nuevos recortes en el gasto y la inversión, exigidos por la Comisión Europea y Berlín para cumplir el objetivo de reducir el déficit público. La desigualdad y el deterioro social que esto genera alimentan el descontento ciudadano y la actual descomposición política en la UE, con el auge de los populismos y la extrema derecha.

No solo en el Caribe

Los paraísos fiscales no solo están en el Caribe, sino también en la UE. Los acuerdos fiscales secretos con las multinacionales, por ejemplo, son una práctica corriente en Luxemburgo, Holanda, Bélgica, Irlanda, Malta, Chipre y Gran Bretaña, además de otros mecanismos de ingeniería tributaria, domicilios fiscales y sociedades pantalla. Irlanda aún no ha recuperado ninguno de los 13.000 millones de impuestos escamoteados por Apple, que descubrió en el 2016 la investigación de la comisaria Margrethe Vestager.

Los acuerdos tributarios secretos de Luxemburgo con las multinacionales, lejos de reducirse con la filtración del 'LuxLeaks', se incrementaron un 50%. Luxemburgo tampoco ha recuperado los impuestos escamoteados por Amazon y Fiat Chrysler que denunció la Comisión Europea, ni lo ha hecho Holanda con Starbucks. El nuevo Gobierno holandés, por el contrario, suprimirá la retención fiscal en los dividendos, lo que facilitará aún más la evasión fiscal.

El caso de Malta

Malta, donde murió asesinada en octubre la periodista Daphne Caruana Galizia, que investigaba la corrupción y la evasión fiscal, ha creado mecanismos para reducir los impuestos a multinacionales, empresas y particulares, además de vender pasaportes por un mínimo de 880.000 euros. El primer ministro maltés, el laborista Joseph Muscat, y su familia han aparecido implicados en los 'papeles de Panamá' y en un escándalo de blanqueo de dinero de Azerbaiyán.

El informe del Parlamento Europeo sobre los 'papeles de Panamá', concluido esta semana, señala que la mayoría de las estructuras 'offshore' descubiertas fueron creadas desde Luxemburgo, Gran Bretaña y Chipre. El informe destaca la negativa de las autoridades maltesas a investigar incluso casos de blanqueo de dinero. Asimismo, el Parlamento Europeo subraya que bufetes de abogados, firmas contables, asesores financieros y bancos de la UE fueron los artífices de la creación de las estructuras 'offshore' y sociedades pantalla destinadas a evadir impuestos y que continúan haciéndolo sin sufrir ninguna penalización.