Las dos orillas

Decía Einstein que lo que no se puede explicar con números, era inexplicable. En estos meses en los que los estrenos se acumulan, las cifras de audiencia nos ayudan a explicar las diferentes realidades a un lado u a otro del Atlántico. En septiembre, la cadena NBC estrenó ‘I Feel Bad’, comedia producida por Amy Poehler. Arrancó con un episodio doble que fue el espacio más visto de su franja. Hasta ahí las buenas noticias, porque la serie anotó cifras parecidas a las que el curso pasado tuvo el drama que ocupó la misma franja horaria, ‘The Good Place’, y pese a precederla la final del ‘American Got Talent’, que tuvo una audiencia de 12,8 millones de telespectadores, el primer episodio lo siguieron 5,7 millones de estadounidenses, y el segundo 4 millones solamente. Es decir, el programa más visto consiguió  en torno al 5% de ‘share’. La crítica  ha considerado correcta esta ‘sitcom’ con el día a día de una mujer que tiene que compaginar su papel de jefa, esposa, amiga e hija al mismo tiempo.

 ‘I Feel Bad’, comedia producida por Amy Poehler, fue lo más visto en EEUU con solo un 5% de cuota

En Italia, la RAI 1, cadena estatal, estrenó ‘La Vita Promessa’, una miniserie de cuatro episodios que cuenta la historia de una madre que huye de Sicilia a Nueva York para escapar de un jefe de la mafia que había asesinado a su marido. Su estreno consiguió unos datos que muestran claramente que la fragmentación de las audiencias en Europa dista aún mucho de la situación de EEUU. Su primer capítulo lideró también la franja, pero logró un 23,5% de ‘share’, y el segundo subió hasta el 26,1%. O lo que es lo mismo, la serie italiana fue vista por 5,7 millones de telespectadores sólo en su país, más que ‘I feel Bad’ con su liderazgo en EEUU, un país con 325,7 millones de habitantes, frente a los 60,6 millones de italianos. Ejemplo perfecto de que la televisión en abierto europea continua siendo la única capaz de crear eventos mayoritarios en la sociedad. Y su impacto es incomparablemente superior al que hoy por hoy obtienen las plataformas de pago.

Europa no es Estados Unidos: entre nosotros la televisión en abierto sigue muy viva

Sirva este ejemplo.  En Reino Unido,  Sky 1 estrenó ‘A Discovery of Witches’, adaptación de la trilogía homónima ('El descubrimiento de las brujas'). Vampiros y brujas  que fueron vistos solo por 310.000 espectadores, con un 1,8% de ‘share’ en su primer episodio. Resultado lógico en un producto que no se emitió en abierto.  Al otro lado del canal, en Francia, el canal privado TF1 ha estrenado ‘Tu vivras ma fille’, una ‘TV movie’ de dos episodios inspirada en una historia real sobre una madre que lucha por salvar a su bebe de una enfermedad presuntamente fatal. Fue vista por un 18,7% , lo que suponen más de cuatro millones de telespectadores. En Portugal, SIC estrenó ‘Alma e Coracao’, un drama diario con el circo como escenario principal. Sus primeros episodios han obtenido un 28,6% de ‘share’ y han sido los más vistos cada día. En Alemania, el ‘biopic’ sobre el diseñador Rudolph Moshammer consiguió un 14,6%. En Bélgica, el telefilme ‘Ils ont échangé mon enfant’, un 14,5%.

Comparen el ‘share’ de las cadenas europeas con el 5% de la serie líder en EEUU y concluirán que Europa no es Estados Unidos y que entre nosotros la tele en abierto sigue muy viva.