ANÁLISIS

Dejen de mentir con las pensiones

Los políticos nunca han dicho la verdad sobre el sistema de protección social

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Albert Sáez

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El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha lanzado una seria advertencia sobre las medidas de revalorización de las pensiones de acuerdo con el IPC que propone el Pacto de Toledo. Lo fácil es pensar que ya estamos ante otra astracanada de estas organizaciones multilaterales controladas por la peor cara del capitalismo. Pero una segunda lectura nos indica algo más grave. Lo que está diciendo el FMI es que no se podrá pagar lo que se promete. En eso la política española y la catalana cada días están más cerca. ¿Por qué no se podrá soportar que las pensiones suban al ritmo de los precios? Pues, fundamentalmente, por los problemas estructurales del sistema de pensiones. Lo que dice el FMI es meridiano: cada año habrá en España más pensionistas menos personas trabajando. Es una variable demográfica que ya no se está a tiempo de reconducir. La única forma de hacerlo no se atreven a decirla los políticos en voz alta: alargar la edad de jubilación, como se ha hecho en esta última crisis, y hacerlo de manera efectiva, es decir, dejar de subvencionar las prejubilaciones para maquillar las cifras de paro. Para acabar de rermatarlo, recuerda el FMI, España ha reducido la media de sus salarios con lo cual la recaudación baja. Esa subida de las pensiones solo se podrá pagar, pues, si se alarga la edad de jubilación, si se promueve una inmigración masiva y se le puede dar trabajo o si se aumentan las cotizaciones sociales o los impuestos

Después de maldecir al FMI, lo que nos toca saber a los ciudadanos es por qué nos mienten nuestros políticos en este tema al más puro estilo Quim Torra. Simplemente porque en el tema de las pensiones nunca nos han dicho la verdad. Nos mintió Franco cuando nos hizo creer que había creado un sistema de Seguridad Social cuando en realidad había creado un sistema de caridad a cargo del Estado. El dinero que se pagó bajo el franquismo se había esfumado. Nos mintieron en los primeros años de la transición cuando nos decían y se peleaban porque el Gobierno era capaz de "garantizar el sistema de pensiones". Nos mintieron cuando firmaron el Pacto de Toledo en el que se comprometieron a no hacer política con las pensiones y en realidad lo que decidieron fur engañarnos coordinadamente. Nos mintieron cuando dijeron que hacían una hucha de las pensiones, porque en España se presenta como un sistema de capitalización de las pensiones lo que es puramente un sistema de reparto. El dinero que nos retienen cada mes en la nómina y el que paga la empresa para la que trabajamos no va a un fondo para cuando nos jubilemos. Va directamente a pagar las pensiones de los actuales jubilados. Eso sí, para calcular lo que se les paga se tiene en cuenta lo que cobraban y el tiempo que cotizaron. Pero lo que cobran depende de lo que cotizan los trabajadores actuales y del total de afiliados a la Seguridad Social.

No hay hucha, no hay seguro de jubilación y nadie puede garantizar que se paguen las pensiones de mañana ni de acuerdo a lo que los trabajadores han cotizado ni de acuerdo a los años que lo han hecho ni a los precios del momento. Así son las cosas y así las cuenta el FMI. Cada cual que se enfade con quien considere oportuno.