Al contrataque

Queridos Jueces Magos del Supremo:

No piensen en la aprobación de los suyos, sino en lo mejor para el país. El independentismo pasa por sus peores momentos. Algunos soberanistas desean secretamente sentencias duras, para que el conflicto perviva

Fachada del Tribunal Supremo

Fachada del Tribunal Supremo

Xavier Sardà

Xavier Sardà

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dejemos las hipotecas aparte. Observo que este año, como es tradicional, cada cual os pide lo que le parece más oportuno. En lo referente al 'procés' de Catalunya y a los políticos presos, el otro día vi una manifestación que pedía condenas larguísimas y, en cambio, los partidos independentistas le piden al Gobierno y los pajes reales de la Fiscalía que suelte a los presos. El Gobierno, por su parte, les pide que no alarguen ustedes la prisión preventiva y que, si acaso, pedirán el indulto cuando haya sentencias. En cambio, los partidos de la derecha, quieren modificar la ley para que no se les pueda indultar. 

Imagino, queridos Jueces Magos, que todo esto debe resultar muy desagradable, porque tanto los pajes de la Fiscalía como ustedes mismos aplican la ley de forma técnica, profesional, desapasionada y ecuánime. Es lo que no entienden los que intentan presionarles. 

Yo mismo, si considerase que ustedes fuesen vulnerables a requerimientos de particulares, les enviaría una carta. Mi carta a los Jueces Magos:

“Lo primero que deben saber es que este año, como patriota, tampoco me he portado muy bien. Quiero decir que, sin ser independentista, no atino en lo de sentirme español, vamos. Dicho esto, y viviendo en Catalunya, es natural que tenga mi criterio personal sobre los políticos. Eso sí, aquí solo por opinar recibe uno críticas durísimas de los suyos, de los otros y de los de más allá. 

A lo que vamos. A veces imagino que el factor humano juega también en las decisiones de la pirámide judicial, cuando algunos jueces dicen que “el golpe de Estado se salda con vencedores y vencidos”, cuando y califican de “nazis” a los líderes independentistas. Esto no ayuda en absoluto, por cierto, a los jueces que ejercen en Catalunya.

Miren, servidor no es un querubín, peinas canas y he vivido el 'procés' con la angustia de los que vaticinábamos el fiasco en el que nos encontramos. El 'procés' ha dividido a los catalanes, y encima, no ha conseguido ninguno de sus objetivos.

Si existe el factor humano en los jueces y fiscales, olvídense ustedes de la mentalidad imperial de una España vacía o de las tribunas de la villa y corte, y recalen en el mundo real. No caigan ustedes en fomentar lo que proscriben. No apelo a sentimientos. Les invoco a no hacer exhibicionismos patrióticos  ni gestualidades doctrinarias. Si a su patriotismo le instilan vapores de astucia, no caerán en sentencias populistas ni testiculares. No piensen en la aprobación de los suyos, sino en lo mejor para el país. El independentismo pasa por sus peores momentos. Algunos soberanistas desean secretamente sentencias duras, para que el conflicto perviva. La gente con dos dedos de frente no queremos ni escarnios ni humillaciones. No queremos más carbón.