Análisis
Valls sacude el tablero
Los improperios han superado toda mesura ante la posibilidad de que el exprimer ministro francés acepte la oferta de Albert Rivera para las elecciones municipales
José A. Sorolla
Periodista
José A. Sorolla
Solo la posibilidad de que Manuel Valls acepte la oferta de Albert Rivera para encabezar la candidatura de Ciutadans a la alcaldía de Barcelona ha sacudido el tablero político catalán a poco más de un año de las municipales. La hostilidad con que ha sido recibido, en especial por los independentistas, demuestra el nerviosismo con que se afrontan las elecciones, una batalla que se va a librar en clave identitaria y nacional. Demuestra también que para los nacionalistas catalanes -tan propensos a promocionar a extranjeros que hablan o escriben en catalán, como el inefable británico Matthew Tree-, solo es catalán quien piensa o actúa como ellos.
Desde que Valls se ha distinguido por su oposición al 'procés' y a la independencia de Catalunya, ha pasado de ser “un catalán en el palacio de Matignon” a “un francés que no ha vivido nunca en Barcelona”. Ha pasado de estandarte a apestado. Los improperios han superado toda mesura. Xavier Trias le ha llamado “facha” con “tics autoritarios” que le “ponen la carne de gallina”. Y eso que el exalcalde de CiU presume de ser socialdemócrata, la corriente en la que Valls siempre se ha integrado dentro del Partido Socialista (PS) francés. Neus Munté (PDECat) ha declarado que a Valls no lo han querido ni en su partido ni los franceses, y Alfred Bosch (ERC) le ha tachado de “paracaidista”. Pero las críticas no han sido solo de los independentistas. Jaume Collboni (PSC) ha destacado que la alcaldía de Barcelona “no puede ser un premio para carreras políticas fracasadas” y la alcaldesa Ada Colau le ha tildado directamente de “reaccionario”.
La etiqueta de político fracasado es la más repetida en todos los ataques. Pero. ¿llegar a primer ministro de Francia sin haber nacido en Francia y sin tener ningún progenitor francés es un fracaso? En pocos países se daría una circunstancia así. Valls nació en Barcelona y ha vivido toda su vida en Francia, pero no se naturalizó francés hasta los 20 años, en 1982. Ha sido concejal en Argenteuil, en la 'banlieue norte' de París, alcalde de Évry, en la 'banlieue sur', diputado, ministro del Interior y primer ministro. Lo único que no ha alcanzado es la presidencia de la República. Es cierto que su carrera se hundió, junto a todo el PS, pero él no fue ni mucho menos el único responsable de ese fracaso.
La apuesta de Rivera por Valls, que aún está por confirmarse –el viernes no había tomado ninguna decisión todavía--, es tan inteligente como audaz y arriesgada. Inteligente porque normalizaría a lo grande que un político de un país de la UE pueda ser candidato en otro, tal como ocurre ya en muchos municipios europeos. La figura de Valls proyectaría aún más Barcelona en el mundo y quebraría el provincianismo y el populismo que nos invaden. Pero existe el riesgo de que Valls fuera solo una flor de primavera que regresara a Francia si no lograse la alcaldía. Ese riesgo es mayor que el reproche de que no conoce la ciudad y carece de un proyecto para Barcelona. ¿Acaso podemos decir que lo tiene Ada Colau tras tres años de mandato?
- Muere Itxaso Mardones, reportera de Gloria Serra en 'Equipo de investigación', a los 45 años
- Hacienda te devuelve 300 euros si tienes un hijo menor de 25 años y 900 si tienes dos: así tienes que ponerlo en la declaración de la renta
- ¿Llamadas que cuelgan? Así son las robollamadas, la nueva táctica de spam telefónico
- La querella del novio de Ayuso se admitirá a trámite pese a la campaña del fiscal para que sea rechazada
- El cabecero de madera de Ikea que se ha convertido número uno en ventas por su precio y facilidad de montaje
- La mitad de los nuevos trabajadores indefinidos o son despedidos o renuncian al cabo de un año pese a la reforma laboral
- Sondeo elecciones Catalunya: Los catalanes prefieren a Illa como president y puntúan mejor a Aragonès que a Puigdemont
- El turista vizcaíno Álex García repatriado de Tailandia se encuentra ingresado en la UCI "estable y animado