La era digital

'Snacks' electrónicos

Navegando por internet uno deriva hacia asuntos que nada tienen que ver con el motivo original por el cual uno ha entrado

Una foto de archivo con dos personas escribiendo en sus teléfonos móviles

Una foto de archivo con dos personas escribiendo en sus teléfonos móviles / periodico

Carles Sans

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Tengo por costumbre reservar el verano para intensificar mi afición a la lectura. Muchos de los libros que compro durante el año los guardo pensando en leerlos en esta época, sin apremios y con tiempo por delante. Sin embargo, habida cuenta del sinnúmero de contenido electrónico que me rodea, cada vez me es más complicado abrir un libro. Ahora disponemos de teléfonos móviles, ordenadores o plataformas digitales que proponen una oferta banal de nuestro tiempo libre mediante aplicaciones o programas de entretenimiento que nos distancian de actividades intelectualmente más constructivas, como la lectura.

Charles Simic, poeta y gran amigo de Octavio Paz, decía en un artículo que pasamos grandes cantidades de tiempo consumiendo contenido electrónico en forma de 'snack', naderías diseñadas para atrapar nuestra atención y hechas a la medida de nuestra dopamina. Suelo caer habitualmente en esa trampa. Y me molesta. Leo muchos diarios digitales cuyos titulares incitan a clicar sobre ellos para conocer más de una noticia que, en realidad, me importa poco o casi nada. Un montón de libros de historia, una novela y un libro de filosofía aguardan en la estantería de libros por leer, y que va disminuyendo a menor velocidad de lo acostumbrado, y es que he adquirido el vicio de husmear en mi ordenador material diseñado para atraparme y vagabundear en él.

De inicio, entro con el objetivo prefijado de buscar información concreta, pero siempre acabo distrayéndome con mil asuntos más, 'snack' puro y duro. Navegando por internet uno deriva hacia asuntos que nada tienen que ver con el motivo original por el cual uno ha entrado. A pesar de ello, me he comprometido a leer los libros pendientes, aunque, eso sí, tenga que esforzarme más de lo acostumbrado, algo que pasa por ignorar los 'snacks' electrónicos de los que Simic advierte que nos hacen más ignorantes, y en consecuencia, en presa fácil de la manipulación política e ideológica del poder.