DOS MIRADAS

Antes de la ira

Apelar al 'seny' es bello, pero supone creer que hay pueblos inmunes a la violencia y eso lo desmiente la historia y la naturaleza humana

La Guardia Civil y la Policía francesa hallan un arsenal de armas y explosivos de ETA, en mayo del 2015, en un zulo de una vivienda en el centro de Biarritz, en el País Vasco francés.

La Guardia Civil y la Policía francesa hallan un arsenal de armas y explosivos de ETA, en mayo del 2015, en un zulo de una vivienda en el centro de Biarritz, en el País Vasco francés. / periodico

EMMA RIVEROLA

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De la ira amarga a la paz. S(u/a)minetik Bakera es un espectáculo documental dirigido por Patxi Lurrak. Se presentó el pasado sábado en Barcelona, con música en directo de Mudoh y dos narradores de excepción: Rosa Lluch, hija del exministro socialista asesinado por ETA, y Robert Manrique, víctima de Hipercor.

En la pantalla, reflexión y emoción. Valentía y poesía. Y dos mujeres, víctimas y sobrevivientes a su duelo. Sandra Carrasco, hija de un concejal del PSE asesinado por ETA en el 2008, y Olatz Etxabe, cuyo padre fue ametrallado por el Batallón Vasco Español en 1975. El testimonio de ambas se entrelaza con otros conflictos, otras voces y otras épocas. Pero siempre el mismo monstruo: el otro. La deshumanización del adversario. El diablo con cola. En la sala planeó el momento catalán. 

Trincheras

¿Cuán lejana está la violencia de nuestras calles? La dureza de la pregunta invita a rechazarla, pero es innegable que algo nos está ocurriendo y quizá erramos si no reflexionamos sobre ello. Se están cavando trincheras. Unos y otros. La palabra traidor se impone. Son muchos los que han roto lazos afectivos por sus creencias, que filtran la información según su querencia y que solo reservan su espíritu crítico a los otros.

Apelar al seny es bello, pero supone creer que hay pueblos inmunes a la violencia y eso lo desmiente la historia y la naturaleza humana. ¿Entonces? Dialoguemos, antes de que no sepamos hacerlo.