Al contrataque

Año sabático

Jordi Évole

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Cuando un equipo está contra las cuerdas, siempre hay quien suplica: "Árbitro, ¡¡¡la hora!!!". Así veo yo a este país, pidiendo la hora desesperadamente. Porque este estrés no hay quien lo aguante. Todo son prisas. Que si la economía tiene que mejorar este año, que si el año que viene tiene que haber un referendo en Catalunya, que si hay que terminar con la corrupción rápidamente... Hasta hay políticos ligados a casos de corrupción que están dispuestos a acabar con la corrupción... ¡Un poquito de por favor! Calma. Dale a la pausa. Si no, vamos a perder la cabeza. Si no la hemos perdido ya. Campana y se acabó. España necesita tomarse un año sabático.

Si queremos alejarnos del estrés, yo recomiendo que nos alejemos de España. Que todos los que vivimos aquí nos vayamos a otro sitio. A oxigenarnos. Que organicen las salidas los del 'caso Turisme', que es una gente condenadamente experta. Y que cada uno vaya donde quiera. Un año sabático es para dedicarlo a lo que te gusta.

Suiza, Rusia, Lloret

Por ejemplo, a quien le guste estudiar que se vaya a Suiza a hacer un curso de perito calígrafo, una profesión con futuro. Y para los amantes del deporte, qué mejor que ir a Rusia a practicar el hockey sobre patines. Si eres de Lloret de Mar te sentirás como en casa. Si lo tuyo es el vicio, no te separes del exdirector general de Empleo de Andalucía. O vete a Andorra con el 'exconseller' Ausàs, y no pararás de fumar. Es conveniente que antes de emprender tan larga marcha, no te olvides de pasar la ITV, para evitar cualquier problema de tráfico, excepto de tráfico de influencias.

Por cierto, que no lo he dicho: con un poco de suerte este año sabático no nos costará ni un céntimo, porque estará patrocinado por Catar. Supongo que algo de dinero les habrá sobrado después de que, según la revista 'France Football', compraran votos para albergar el Mundial de Fútbol 2022. Y si, además, todos nos ponemos una camiseta con el logo de Unicef casi seguro que acabarán haciendo un esfuerzo. Porque una buena imagen cuesta más que mil palabras.

Solo de pensar en estas vacaciones, ya me estoy empezando a relajar. Pero, ojo, esto hay que hacerlo bien. Seamos serios. Cuando alguien quiere coger un año sabático, tiene que comunicarlo a la empresa. Pues España tiene que hacer lo mismo. Que lo comunique, por ejemplo, a la ONU y le pida también una excedencia para que nos guarde la plaza. Y si la ONU quiere que dejemos un sustituto, en lugar de irnos todos que se quede Aznar. No es por nada, pero como Anson ha soltado que es necesario que vuelva...

Además, Aznar es la persona adecuada, admitámoslo. Él sabrá qué hay que hacer si, mientras no estamos en España, alguien intenta entrar para invadirnos. Domina las invasiones como nadie. Eso es una verdad como un templo. Aunque, según Mariano Rajoy, "todo es falso, salvo alguna cosa". Esperemos que Rajoy no se vuelva a equivocar, y al final todo sea cierto, salvo alguna cosa.