¡Adiós campaña, adiós!

Ahora va el Gobierno en funciones y habla con Puigdemont y Junqueras lo que no han hablado desde el siglo pasado. Nunca es tarde. Mas vuelve a decir que si van 'juntspelsí', él se ofrece a ir en la lista para las generales aunque sea en el número 14 o así. Vaya ofertaza. Bueno, pues que tenemos otra campaña electoral.

Son así de limitados. Hay que pensar actividades óptimas para no hacerles ni caso. Necesitamos ideas para obviar la pesadísima situación que nos espera. Otra campaña no, por favor... Que ellos hagan la suya y nosotros, a lo nuestro. Necesitamos actividades variadas que pueden ayudarnos al imprescindible alejamiento de la ingrata realidad. Porque lo cierto es que nos han dejado la realidad aburridísima y hecha un ovillo de harapos. He aquí la recolecta de ideas propias y ajenas:

1) Podemos buscar el significado y origen de nuestro nombre.

2) Inventemos una pizza. Siempre puede haber una combinación nueva y sin chorizo.

3) Alarguemos las siestas.

4) Acampemos en el balcón o en el patio, pero sin smartphone.

5) Volvamos a la plastilina.

6) Recojamos agua de lluvia. Si no para beber, para regar las plantas. Es gratis.

7) Intentemos doblar por la mitad una hoja de papel más de siete veces.

8) Intentemos ver cuántos calcetines nos podemos poner unos encima de otros. No divierte pero entretiene.

9) Hagamos un xilófono de vasos de cristal. Afinemos 12 vasos con diferente cantidad de agua en cada uno de ellos. Luego los ordenamos de mayor a menor cantidad de agua. ¡A tocar!

10) Miremos lo que hay en la basura del vecino.

11) Tratemos de pensar en un nuevo color. ¿Es posible? No vale ni el morado ni el naranja.

12) Hagamos artesanía con las papeletas, el mailing y la propaganda. Papiroflexia subvencionada.

13) Hagamos las maletas para viaje largo. Que no falte nada. Luego las deshacemos y nos sentiremos cual diputado de micro-legislatura.

14) Pongamos los adornos de navidad. El belén ya lo han montado en el Parlamento.

15) Tumbémonos en el suelo mirando las nubes. A diferencia de los candidatos, los cúmulos siempre son distintos.

16) Los excéntricos podéis leer algún libro o ver alguna película. Nada de suspense ni de Borgen, que ya ha habido sobredosis en el Congreso.

17) Llevemos la contraria a todo el mundo durante una semanita, y nos quedaremos sin pactos y en la estacada. Es lo más de lo más.

18) Podemos mirarnos al espejo. Si le sonreímos, nos sonreirá.

19) No olvidemos lo que dijo Voltaire: «El secreto de aburrir a la gente consiste en decirlo todo». Pues hala, otra campaña.