Dos miradas

58h 01m

A las 00.01 horas del domingo de Pascua, los cuarteles, el Ministerio de Defensa y las delegaciones territoriales del Estado han vuelto a izar la bandera hasta el punto más alto, tras haber estado 58h 01m a media asta

Cospedal, en el Corpus Christi

Cospedal, en el Corpus Christi / ep

Josep Maria Fonalleras

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Cuando escribo este artículo ya hemos llegado a las 00.01 del domingo de Pascua. Es decir, legalmente, Jesús ya ha resucitado, aunque, para ser estrictos, deberíamos hablar de las 00.00 horas, que ya es el día después del sábado de gloria, el momento en que Dios Nuestro Señor vence al imperio de la muerte y revienta la losa de la fosa mortuoria. A las 00.01 horas, todos los cuarteles españoles, el Ministerio de Defensa y las delegaciones territoriales del Estado habrán vuelto a izar la bandera hasta el punto más alto, después de haber estado exactamente 58h 01m con la bandera a media asta, en señal de respeto por la divinidad muerta y porque «es una tradición secular de los ejércitos».

La medida es del todo desproporcionada. A las 14.00 horas del jueves santo, Cristo aún no había muerto. Se estaba preparando para la santa cena y para lavar los pies a los apóstoles. De hecho, no le habían ni siquiera detenido de forma provisional. Ni acusado de nada, todavía. Y va y el Ejército español considera que debe dejar la bandera a media asta. Muy mal hecho. Deberían haber esperado, al menos, que las autoridades judías y romanas aplicaran la ley, por no decir que lo mejor hubiera sido rendir homenaje a partir del momento de la muerte, que fueron las 15.00 horas del viernes. Eso sí: me hubiera gustado mucho ver cómo el escuadrón de turno, a las 00.01 horas del día de Pascua procedía a la restauración de la normalidad. En todo el territorio de este Estado aconfesional.