7 cantautores indie rock de culto

En un mundo justo, Damien Jurado sería un nombre que saldría en cada casa, cada día, durante la comida. Vivimos en un mundo injusto, pero eso tiene sus ventajas: por ejemplo, que todavía queden entradas para su inminente concierto en L'Auditori y los despistados estén a tiempo de conseguir una. Recordamos a continuación el caso de Jurado y el de otros cantautores alternativos con larga y fértil carrera, pero menos fama de la que merecen.

1. Damien Jurado

Los primeros discos de este veterano del folk-rock alternativo eran rematadamente tristes pero, con el tiempo, Jurado se acabó abriendo a la posibilidad de la luz y llevando su paleta sonora en direcciones inesperadas.

Con 'Maraqopa' (2012) encaró una época psicodélica que duró tres discos. En su último largo, 'The horizon just laughed' (2018), prefiere los suaves arreglos orquestales.

2. David Bazan

El David del título de 'Ghost of David' (2000), uno de aquellos ultra-tristes de Jurado, no es otro que David Bazan, con el que fue al instituto y compartió la banda Coolidge. Bazan se hizo casi famoso con Pedro The Lion, proyecto 'con banda' marcado por las cuestiones de fe (fue cristiano, pero lo dejó). Desde el 2006, publica bellos discos a su nombre, como el electrónico 'Care' (2017).

3. Phil Elverum

El hombre (algo) más conocido como The Microphones y Mount Eerie. Con este último alias publicó, el año pasado, su gran obra maestra: 'A crow looked at me', un disco de pop más hablado que cantado y más silencioso que ruidoso, homenaje sutil a una esposa (Geneviève Castrée) fallecida de cáncer a los 35 años. Elverum ha rehecho su vida con la actriz Michelle Williams, lo que le ha llevado a páginas de revistas que antes lo habían ignorado por completo.

4. Cass McCombs

Desde hace ya un par de décadas, McCombs no deja de publicar grandes canciones en las que aprehende múltiples géneros sin perder nunca su lacónica personalidad. Cualquiera de sus discos es una buena puerta de entrada a su mundo, pero 'Catacombs' (2009) y 'Mangy love' (2016), en particular, son fáciles de querer.

5. Mirah

Si Mirah no es más conocida, es por su bendita manía de retorcer sus grandes partituras pop con destellos líricos o formales profundamente personales. El citado Phil Elverum produjo (a solas o con la propia artista) todos sus discos hasta '(a)spera' (2009). Hace poco menos de un mes publicó el accesible y adorable 'Understanding'.

6. Marissa Nadler

Casi todos los discos de Nadler son iguales, maravillosamente iguales: siempre suenan a folk gótico y giran en torno a lo mismo, amor y desamor, sobre todo lo segundo. Con el tiempo, eso sí, han ido perdiendo bruma sonora, oscuridad: en 'Strangers' (2016) y en el nuevo y exquisito 'For my crimes' (2018) se puede escuchar la bella voz de Nadler con más claridad que nunca.

7. Laura Veirs

Esta cantautora de Seattle, con base en el folk, pero simpatía también por el indie rock, el country o el jazz, lleva 15 años editando discos impecables; 'Carbon glacier' (2004) y 'July flame' (2010) son clásicos semiocultos. Hace dos, publicó uno a seis manos con Neko Case y k.d. lang, es decir, Veirs juega en una liga superior. Su último (sensible) puñetazo sobre la mesa es 'The lookout', en el que hace coros Sufjan Stevens. Buenas compañías.