el museo imaginario

El 'anónimo' parque de Font del Racó

El creador de La Santa Market, un popular encuentro que une música, artesanía, moda y gastronomía en Santa Cristina d'Aro, recomienda este desconocido y frondoso espacio verde de la avenida del Tibidabo

El 'anónimo' parque de Font del Racó

El 'anónimo' parque de Font del Racó / periodico

Ferran Imedio

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Uno de los parques más anónimos de Barcelona, el de la Font del Racó (avenida del Tibidabo, 72), no esconde secreto alguno para el empresario Julio Rico. Tiene un porqué: estudió allí al lado, en el colegio Frederic Mistral, y este espacio frondoso y lleno de caminos y desniveles ("en ese entorno parece que estés fuera de la ciudad"), fue escenario de clases de gimnasia y de reuniones de amigos al salir de clase.

Y qué decir de la avenida del Tibidabo: tantas veces la recorrió durante su etapa escolar... "Iba al cole en el Tramvia Blau a la ida, porque la subida era muy fuerte, y bajaba a pie con los colegas, charlando, hasta la plaza de Kennedy, y de ahí hasta la de la Bonanova, donde merendábamos. Añoro aquella época; son recuerdos extraordinarios".

Uno de ellos era alguna que otra caída cuando se bajaba del tranvía en marcha, haciendo oídos sordos a la bronca del conductor. "Era bastante travieso", confiesa, sin querer entrar en más detalles. Más adelante, el creador de La Santa Market, una especie de mercadillo de verano en la hípica de Santa Cristina d’Aro que hasta el 26 de agosto unirá música, artesanía, moda y gastronomía que marcan tendencia, se fue haciendo mayor y empezó a ir en moto.

CAÍDAS EN MOTO POR CULPA DE LOS RAÍLES DEL TRANVÍA

"Me caí varias veces porque las ruedas se metían en los raíles del tranvía", recuerda con una sonrisa que se convierte en un gesto serio cuando le comentas la posibilidad de que este histórico medio de transporte desaparezca definitivamente (según el Ayuntamiento, ha dejado de circular para someterse a una reforma integral). "¡Sería una lástima! Para mí no era para hacer turismo, sino una necesidad".

Ya adulto y viviendo en Santa Cristina d’Aro, Rico aún sube la avenida del Tibidabo, pasa junto al parque de la Font del Racó (el rincón favorito del escritor y dibujante Apel·les Mestres, que tiene allí un monumento en su honor), come en el restaurante La Venta y, sobre todo, disfruta recordando aquellos maravillosos años.