NUEVA ETAPA

La Pegatina despega

GRUPO LA PEGATINA

GRUPO LA PEGATINA / periodico

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

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La Pegatina dará este año, el 13º de su trayectoria, un salto de escala: banda ampliada hasta los 13 integrantes y conciertos en festivales y grandes recintos en los que ocurrirán “cosas que nunca se han visto en directo”, asegura su cantante, Adrià Salas. Para situarse a la altura del desafío y hacerlo más visible, el grupo de Montcada i Reixac procederá a cambiar de nombre y convertirse temporalmente en La Gran Pegatina, una “’big band’ o, mejor aún, una megabanda”, la bautiza Salas, a la que se podrá ver el 2 de julio en la tercera edición de Canet Rock.

El propósito es “coger muchos ingredientes diferentes y jugar con ellos partiendo de cero”, construyendo un espectáculo dinámico, a partir de su mestizaje con base de ska y rumba, con dos nuevas voces en acción, dos músicos de viento, un violín, otra guitarra y un ‘videojockey’. Un concierto “muy loco, esa es la palabra”, subraya Salas, que establecerá diálogos con La Canija, cantante de D’Callaos (conocida por los fans de La Pegatina por su dúo en el éxito ‘Alosque’), y Pipo Ti, la voz del grupo madrileño de reggae Gregtown. “No serán simplemente coristas, sino que cantarán estrofas y piezas enteras”, destaca. En los vientos, Tuli (Pereza, Leiva; productor artístico de las últimas giras del grupo) y Marcos Crespo (Vetusta Morla, Dani Martín), más el guitarrista Miki Florensa, el violinista Víctor Guadiana y el ‘videojockey’ bretón Thibault Chenard.

GRANDES FESTIVALES

Un combinado de músicos con credenciales muy variadas, del rock al flamenco y el jazz latino, en el que “cada uno tendrá secuencias de protagonismo dando pie a momentos sorprendentes”, explica Salas, que menciona referentes inspiradores en ese campo como la gira ‘Jai-Alai Katumbi Express’, de Manu Chao y Fermin Muguruza, o la propuesta de la Tokyo Ska Paradise Orchestra. El ‘tour’ comenzará el 29 de abril en el multitudinario festival Viñarock, en Villarobledo, Albacete (“van 70.000 personas, para flipar”) y durará cinco meses, si bien el operativo contempla otros dos meses previos para los ensayos. “Cuatro músicos vendrán expresamente de Madrid dejándolo todo, y Pipo Ti, de Costa Rica, donde vive. Eso ya da una idea de su nivel de motivación”, explica entusiasmado el cantante.

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Contando músicos y personal técnico, hablamos de un equipo de 22 personas de gira. ¿Se sostendrá eso económicamente? La clave es sustituir el circuito ordinario de fiestas mayores por plazas de mayor envergadura: además de Canet y Viñarock, el grupo tiene ya confirmadas actuaciones en el Weekend Beach Festival (Torre del Mar, Málaga), Arenal Sound (Borriana, Castellón), Medusa Sunbeach Festival (Cullera, Valencia)… La prioridad está clara: “Queremos que nos vea el mayor número de gente posible”, sintetiza Salas. “No queremos fiestas mayores donde haya que poner una entrada de pago para vernos. Y si en algunas no necesitan poner entradas a la venta querrá decir que son muy grandes y nos verá mucha gente, lo cual ya nos está bien”, argumenta. La Pegatina conoce bien ese circuito veraniego generalmente exento del paso por taquilla, y el cantante reconoce que “los grupos, cuando saben que la gente ha pagado para verles, se sienten motivados a hacerlo mejor”.

INVENTAR PROYECTOS

Aún está fresco su último disco, el quinto, ‘Revulsiu’, publicado el pasado mayo, pero son tiempos de renovación constante de la oferta y solo las estrellas que ofrecen grandes giras mundiales pueden permitirse girar durante dos años seguidos con el mismo espectáculo. El mercado es limitado, y “la rapidez con la que se consume la cultura hoy en día hace que tengas que inventar cosas periódicamente”, razona Salas.

Y eso que no hablamos de un grupo circunscrito al circuito catalán: el año pasado, sin ir más lejos, La Pegatina viajó dos veces a Latinoamérica (once conciertos en México) y se movió por varios países europeos. Ahí, sus plazas fuertes son Francia (sur y oeste en particular), el norte de Italia, Bélgica y, sobre todo, Holanda, donde la banda actuó por primera vez en el 2009, coincidiendo con un tramo de la Vuelta Ciclista a España situado en ese país. “Una agencia holandesa quiso probarnos, salió bien y nos comenzaron a llamar de festivales importantes de allí. Luego hicimos una gira de salas, seguimos creciendo y ya hemos ido a festivales grandes, a tocar antes de The Killers y Green Day”.

CONCIERTO NÚMERO 1.000

Después de 13 años de carrera, el grupo ahora conocido como La Gran Pegatina celebrará su concierto número 1.000 en La Riviera (Madrid), donde actuará el 14 y 15 de octubre, en el tramo final de una gira que se espera cuente con fecha en Barcelona. Por ahora, la “megabanda” solo se podrá ver en dos escenarios catalanes, Tàrrega (14 de mayo) y ese Canet Rock en el que repetirá tras su celebrada actuación del año pasado. “Le tenemos ganas. Será muy épico”, augura Salas, que ve en ese festival “un punto de encuentro de los músicos y una ocasión de ver a todos los grupos que no has podido ver durante el año”.

El clímax del ‘tour’ de La Gran Pegatina lo pondrá un disco en directo, el primero del grupo, que saldrá a final de año. ¿Y si la formación gusta tanto a sus fans que les piden que La Pegatina siga siendo “Gran” indefinidamente? “Les tendremos que decir que no es viable”, suspira Salas, que tiene la réplica a punto. “Intentaremos que La Gran Pegatina guste incluso más que La Pegatina, y nuestro siguiente reto será que La Pegatina supere a La Gran Pegatina”.