ÓBITO

Muere la actriz Cristina Cervià a los 53 años

La intéprete y directora teatral gerundense ha fallecido a causa de un cáncer

Cristina Cervià, en el 2007

Cristina Cervià, en el 2007 / periodico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La actriz y directora teatral gerundense Cristina Cervià ha fallecido este domingo a los 53 años a causa de un cáncer.

Licenciada en Filología Románica, la intéprete fue una presencia habitual en el teatro desde el 2006 hasta el 2016, año en el que se apartó de los escenarios a causa de la enfermedad. Cervià también participó en series de televisión como 'La Riera' o 'Nit i dia' y en películas como 'Blog', de Elena Trapé; impartió clases de interpretación y puso voz a múltiples presentaciones y actos culturales. Su fallecimiento causó una profunda conmoción entre personalidades de la cultura, como la propia 'consellera' Laura Borràs, que mostró sus condolencias en Twitter:

En el año 2007, José Carlos Sorribes entrevistó a Cervià para el suplemento EXIT de EL PERIÓDICO por su trabajo en 'Lúcid', de Rafael Spregelburd, por cuyo trabajo ganó un Premio de la Crítica Teatral. Esta es la entrevista:

Ha desarrollado su larga carrera en Girona. ¿Pensó alguna vez en instalarse en Barcelona

Nunca me lo he planteado aunque sí hice clases de voz en el Institut con la grandísima Coralina Colom. Cuando desapareció El Talleret, me resitué en Girona y empecé a trabajar con gente más joven, de una generación posterior a la mía, como mis compañeros de Lúcid.

Recuerde cómo nació la obra.

Un grupo de actores hicimos un curso con el argentino Rafael Spregelburd, el director y el autor, en el Temporada Alta del 2005. Y decidimos que queríamos trabajar con él. La productora La Planeta también nos compró la moto.

¿Resultó tan fácil arrancar el proyecto ¿Fue dicho y hecho?

A veces las cosas son más sencillas de lo que parece. Meritxell Yanes, que es más joven y osada que yo, se lo preguntó directamente. Rafael aceptó y escribió una obra, además, a medida de nuestras cualidades. Lo que me deja mal parada, porque yo soy una madre histérica Risas. En serio, fue un regalo doble.

¿No puso condiciones?

Solo que debíamos ensayar en Buenos Aires, donde él vive. Lo hicimos, cuando el texto ya estaba traducido al catalán, dos meses en el Casal Català de Buenos Aires. Allí mismo se estrenó la obra antes de llegar al Temporada Alta del 2006. La producción fue más cara de lo habitual, claro.

De ahí fueron un par de semanas a la Beckett con refrendo de público y crítica y ahora han vuelto. ¿Cómo explica el éxito?

Lúcid es un puzle gigante de muchas piezas y todas encajan. Cuando lo leía me costaba imaginarlo, porque necesitaba que me lo explicaran. No entendía nada. Pero Rafael lo veía clarísimo; tiene una intuición teatral privilegiada. Como intérprete, disfrutas cada día un texto que pone continuas trampas al público. Nos planteamos hacer la función en castellano.

Ha recibido el premio de la crítica de BCN como mejor actriz del pasado curso. ¿Va a ser un impulso para su carrera?

Llevo 20 años haciendo teatro, pero si no pasas por Barcelona no existes. No soy una cara visible y nadie me conoce. En esos 20 años, he subido al escenario casi cada día y solo he estado parada seis meses. Algo insólito, y más sin estar en Barcelona, repito. Todo lo que venga será una propina para mí.

TEMAS