CRÍTICA

'Straight outta Compton': del gueto a la Wikipedia

NANDO SALVÀ

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STRAIGHT OUTTA COMPTON ***

STRAIGHT OUTTA COMPTON  ***Dirección: F. Gary Gray

Con: O’Shea Jackson Jr., Corey Hawkins, Jason Mitchell, Neil Brown, Jr. 

Título original: 'Straight outta Compton'

País: EEUU

Duración: 147 minutos

Año: 2016

Género: Biográfica

Estreno: 13 de noviembre del 2015

Dado que, desde sus inicios, los miembros del colectivo rapero N.W.A. se revelaron como eficaces promotores de sí mismos –por ejemplo, exaltando sus orígenes en las malas calles–,  es apropiado que fueran ellos mismos quienes configuraran su propio legado cultural –Ice Cube, Dr. Dre y la viuda de Eazy-E ejercen aquí de productores– a través de un ejercicio fílmico rotundamente complaciente que los retrata como deidades. Sin duda 'Straight outta Compton' habría agradecido perfiles más complejos aunque, después de todo, la mitificación siempre ha sido un método esencial del hip-hop.

N.W.A., hagamos memoria, fueron la banda pionera del rap de la Costa Oeste estadounidense, y uno de los grupos de hip-hop más influyentes de la historia. Fueron ellos quienes popularizaron las rimas gangsta, que repasaban la cruda realidad desde el polvorín del gueto de Los Ángeles, y convirtieron la realidad de ser joven y negro en América en una serie de canciones llenas de furia contra el racismo cotidiano de la policía. Recrear esas dinámicas raciales, al menos igual de relevantes ahora que entonces –no hay más que ver los telediarios--, da relevancia extra a lo que de otro modo sería el típico 'biopic' musical.

Al fin y al cabo, 'Straight outta Compton' condensa la historia y la reduce a una retahíla cronológica de sucesos notables. En todo caso, el simplismo y la falta de sutileza son hasta cierto punto perdonables en tanto que contribuyen a hacer justicia a un movimiento que durante mucho tiempo fue marginalizado e incluso demonizado por la narrativa cultural mayoritaria y, al mismo tiempo, a recordar no sin cierta nostalgia una época en la que el rap implicó un verdadero desafío contra la oficialidad política.. 

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