Ricky Rubio: "Nos ganamos el derecho a ir a Río ¿por qué no vamos a estar?"

El base de los Timberwolves critica la amenaza de sanción sobre la selección y se muestra ilusionado por acudir a los Juegos

Ricky Rubio, en la conversación con este diario en el acto de presentación de su campus

Ricky Rubio, en la conversación con este diario en el acto de presentación de su campus / periodico

LUIS MENDIOLA / BARCELONA

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Acaba de finalizar su quinta temporada en la NBA con los Minnesota Timberwolves, que se han quedado fuera de los 'play-off', pero Ricky Rubio sigue pensando en baloncesto. En parte porque la Liga estadounidense le ha dejado un mal sabor de boca a nivel colectivo. «Ha sido un fracaso no entrar en la lucha por el título», admite sin ningún tipo de paliativos. En parte porque en el futuro inmediato se alza la cita olímpica de Río, «lo máximo a lo que aspira un deportista» y no quiere perdérsela.

Por una u otra razón, el base catalán de El Masnou, de 25 años, no quiere parar y ya tiene en la cabeza el desafío de los Juegos y también la nueva etapa que se abre en los Timberwolves con la llegada al banquillo de Tom Thibodeau, uno de los técnicos de más prestigio de la Liga. «Esta selección se ha ganado el derecho de pensar en las medallas y EEUU es favorito, cierto. Pero siempre que hemos jugado una final contra ellos, hemos podido plantar cara y creo que llegará el día que les ganaremos», afirma con el discurso ambicioso que ha marcado toda su carrera.

La misma ilusión destila por el nuevo proyecto en Minnesota tras el cambio de técnico después de una nueva temporada en la que, con solo 29 victorias, se han quedado muy lejos de los 'play-off'. «Estamos muy ilusionados con la llegada de Thibodeau. Charlamos hace poco por teléfono y sé que Pau Gasol le ha hablado bien de mí. Creo que es una apuesta firme del propietario, que ha dado un puñetazo encima de la mesa. Sabemos que tenemos un equipo joven y con mucho talento pero no acabamos de utilizar las herramientas que tenemos. Con Thibodeau podemos hacer algo importante», cuenta en referencia al experimentado entrenador que dirigió a  Gasol en los Bulls hace dos temporadas.

CRÍTICO CON FIBA

Ricky aguarda con ilusión la cita olímpica de Rio donde espera estar con la selección. Participó en Pekín con 17 años y luego, por una lesión, se perdió Londres. «Ya tengo el récord de precocidad. ¿Por qué no ganar ahora el oro?», se pregunta el base catalán, que admite  que su trabajo en las próxima semanas se centrará en formar parte de la lista de Scariolo. «Ojalá pueda estar aunque sé que la competencia es máxima, sobre todo en la posición de base», afirma.

Sin querer entrar en profundidad en el conflicto que vive el baloncesto por las amenazas de sanción de la FIBA a los países que no acepten competir en su torneo, Ricky cree que sería una decisión arbitraria apartar a la selección de los Juegos. «No hemos hecho nada ilegal. Nos ganamos deportivamente el derecho a Río. ¿Por qué no vamos a estar?», reflexiona en una conversación con este diario, después de la presentación del campus para niños que organiza en El Collell (Banyoles), entre el 16 de junio y el 2 de julio, y que llega a su octava edición «Este es un conflicto entre clubs y la FIBA que deben solucionar ellos sin que afecte a la selección», remarca.

Ricky valora su temporada en la NBA como positiva a nivel personal. «He jugado a mi mejor nivel», cuenta después de disputar 76 de los 82 partidos con unas medias de 10,1 puntos, 4,3 rebotes, 8,6 asistencias y 2,131 robos, a una décima de Stephen Curry, que dominó este apartado estadístico con 2,139. «Me lo podía haber dejado», bromea sobre Curry, al que ve como la referencia de la NBA. «Está a un nivel espectacular. Es de los jugadores por los que vale la pena pagar para verle jugar. Me admira su constancia. Lleva dos años así. Pero para marcar una era deberá mantenerse unos cuantos años», sentencia.