TRAS EL RECURSO DEL GOBIERNO DE MAY

El Supremo británico estudia el papel del Parlamento en el 'brexit'

El presidente del tribunal insta a las partes a rebajar la tensión y denuncia las amenazas recibidas por los contrarios a la salida de la UE

Manifestantes pro-UE participan en una protesta ante el Supremo, en Londres, este lunes.

Manifestantes pro-UE participan en una protesta ante el Supremo, en Londres, este lunes. / periodico

BEGOÑA ARCE / LONDRES

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Los 11 miembros del Tribunal Supremo del Reino Unido examinan a partir de este lunes, y durante cuatro días, la polémica cuestión de si el Parlamento británico debe o no pronunciarse sobre el ‘brexit’, antes de que el Gobierno inicie formalmente el proceso de ruptura con la Unión Europea (UE).

La más alta instancia de la justicia británica está revisando la sentencia pronunciada el pasado mes de noviembre por el Alto Tribunal de Londres, según la cual el Gobierno británico no puede activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa sin consultar previamente a diputados y lores. El Ejecutivo que dirige la primera ministra Theresa May decidió apelar el veredicto, desoyendo a numerosos expertos legales que dan por perdida la reclamación. La votación parlamentaria podría retrasar durante meses el proceso de divorcio.

La sentencia del Alto Tribunal, en un caso encabezado por Gina Miller, una gestora de inversiones de la City, enfureció a los defensores del ‘brexit’. Miller ha sido amenazada de muerte y necesita un servicio de guardaespaldas. Los tres jueces que tomaron la decisión fueron tachados por el diario 'Daily Mail' como “enemigos del pueblo” e incluso se publicaron datos personales de ellos, incluida la inclinación sexual de uno de los magistrados.

LEÑA AL FUEGO

Tal es la tensión que el presidente del Tribunal Supremo, Lord David Neuberger, al abrir la sesión ha pedido a todas las partes implicadas en el debate “no echar leña al fuego”. También ha denunciado las amenazas recibidas por los reclamantes. “Amenazar e insultar a las personas por ejercer su derecho fundamental de acudir a la justicia es minar el Estado de derecho”, ha señalado. “Como jueces, nuestro deber es abordar las cuestiones de manera imparcial y responder a ellas en función de la ley”, ha añadido. “Las cuestiones políticas no son el objeto de este recurso”.

Una manifestación planeada por los partidarios del ‘brexit’ ante el edificio del Supremo fue suspendida por miedo a la actuación de elementos violentos de la extrema derecha. Nigel Farage, el exlíder del UKIP que en principio lanzó la idea, finalmente abandonó la tentativa por la falta de afluencia con que contó hace poco una convocatoria similar ante el Parlamento.

El fallo del Tribunal Supremo no se conocerá muy probablemente hasta enero.