Manifestación Stop Trump en Barcelona

Berta Viader tiene 21 años y ha dedicado su sábado por la mañana, siempre preciado, a acudir a una protesta contra Donald Trump frente al consulado de EEUU en Barcelona. "No entiendo cómo esto no está más lleno de gente, deberíamos ser miles", reflexiona en medio del Passeig de la Reina Elisenda, cerrado al tráfico, esta estudiante de Antropología. Quizá tenga que ver con su firme compromiso el hecho de tener una amiga musulmana, Sara Bajiji, también de 21 años y estudiante de Derecho, que permanece a su lado.

Y es que le parecen pocas las 300 personas se han concentrado bajo el lema #Stop Trump, con el objetivo de denunciar las políticas "islamófobas" del nuevo presidente de EEUU. En especial, la protesta va dirigida al veto a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana suspendido horas antes por la justicia federal estadounidense. El acto ha sido convocado por la plataforma Unitat contra el Feixisme i el Racisme, que ha recibido la adhesión de cerca de un centenar de colectivos sociales, oenegés, partidos políticos y sindicatos. Las principales formaciones políticas de la izquierda catalana se han adherido a la convocatoria.

Con la noticia todavía fresca de la decisión judicial de suspender el decreto presidencial que veta el acceso a EEUU de los ciudadanos de siete países musulmanes, los manifestantes coinciden en mostrar simple escepticismo. "Nos lo tendremos que creer, ojalá, pero a ver si es verdad porque el Gobierno recurrirá y hará lo posible por evitar que se anule su decisión", argumenta Conchita Puigarnau, de 74 años, vecina del Eixample.

RECUERDO A LAS VÍCTIMAS DE QUEBEC

Pancartas -'No fear, refugies wellcome here' ('Sin temor, los refugiados son bienvenidos), 'Stop islamofobia', entre una veintena de eslóganes- y consignas han reflejado los principales argumentos de los concentrados. Entre ellos, Sahim Benamara, del Centro Cultural Islámico de Catalunya, que ha tomado la palabra para hacer mención de los asesinatos xenófobos cometidos esta semana en una mezquita de Quebec. "El asesino es un admirador de Trump y Le Pen", ha advertido Benamara. "Si continuamos así, sin poner remedio a las corrientes islamófobas, viviremos muchos episodios como los de Quebec", ha puntualizado antes de pedir un minuto de silencio por las víctimas.

Para David Karvala, de la Unitat cotra el Feixisme, es fundamental intentar que Trump no termine su mandato. Y para Rachel Mantiñan, una mujer norteamericana de 32 años residente hace 11 en Barcelona, trabajar "cada día, cada uno desde su ámbito y en función de sus posibilidades" contra la gestión del líder de una de las potencias mundiales. Para predicar con el ejemplo, ella forma parte de la organización Women's March Barcelona.