La crisis política venezolana

La oposición amenaza con una huelga general mientras los enfrentamientos siguen en Venezuela

Un joven muerto eleva a al menos 27 las personas fallecidas a lo largo de estos días de protestas por todo el país

protestas en venezuela

protestas en venezuela / periodico

ABEL GILBERT / BUENOS AIRES

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Las calles de Venezuela han vuelto a hablar. La opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) ha pedido dirigirse hacia la sede de la Defensoría del Pueblo. Las fuerzas de seguridad lo han impedido. En distintos puntos de Caracas, la policía ha disparado gases lacrimógenos mientras, como respuesta, los manifestantes han lanzado piedras. Un joven de 22 años de edad ha muerto en los enfrentamientos, lo que eleva a al menos 27 los fallecidos en las últimas semanas de protestas. 

“¿Quiénes somos? ¡Venezuela! ¿Qué queremos? ¡Libertad!”, han gritado los manifestantes antes y después de encontrarse con la Guardia Nacional y la Fuerza Nacional Bolivariana. Los manifestantes querían llegar hasta la Defensoría  del Pueblo para exigir el cese de los magistrados de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que avalaron semanas atrás la disolución de la Asamblea Nacional (AN).

El gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, uno de los más decididos promotores de la ofensiva política opositora, ha asegurado que los venezolanos se mantendrán en las calles hasta forzar la salida electoral. “Mientras más represión, más contundencia (...) El que tiene la verdad y la razón de su lado, no tiene porqué sentir miedo”, ha dicho Capriles. La MUD, ha añadido, se mantiene firme en sus demandas al Gobierno de Nicolás Maduro. Además de un llamado a elecciones, se reclama  la apertura de un canal humanitario y liberación de todos los presos políticos.  “A nuestras cuatro peticiones le sumamos una quinta: el desarme de los grupos paramilitares (...) Civiles armados actúan fuera de la ley y no hay ninguna actuación por parte de órganos de justicia”, ha advertido.

Diosdado Cabello, diputado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y de hecho número dos del Gobierno, ha acusado a Capriles de irresponsable. Para Cabello, la MUD realiza acciones “cobardes” y “manipuladoras” que buscan llamar la atención internacional.

La situación venezolana es seguida de cerca con diferentes miradas por la comunidad internacional. El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) decide mañana si convoca una reunión de alto nivel para discutir el caso. La ministra de Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, ha acusado al secretario general de la OEA, Luis Almagro, de promover acciones ilegítimas en contra del orden democrático del país. Rodríguez dijo a su vez tener la orden de Maduro de encabezar la retirada de Venezuela de esa organización si continua esas maniobras.

PELIGRO DE GUERRA CIVIL

“Lo que vivimos en Venezuela hoy no tiene parangón con ninguna situación anterior de nuestra historia”, asegura Nícmer Evans, un licenciado en Ciencias Políticas que expresa su disidencia con el chavismo desde la izquierda. Evans avizora un peligro extremo. “Por un lado mercenarios progubernamentales (erróneamente llamados colectivos, que no lo son) convirtiéndose en el brazo armado del stalinismo facineroso con el amparo de un sector de la Fuerza Armada Bolivariana y, por el otro lado, unos guarimberos encapuchados financiados por grupos facinerosos miameros (por lo menos), que empiezan a apertrecharse de armamento para la confrontación con el Gobierno. Esto, sin duda alguna,  puede claramente derivar en una guerra civil si seguimos alimentando el odio, la exclusión, la descalificación, el desprecio y la ofensa desmedida desde los actores políticos polarizados”.

En este contexto, Maduro llamó a sus seguidores a prepararse para enfrentar nuevas acciones de la MUD, entre ellas un posible llamado a la “huelga general oligárquica”.