Nigel Farage, el antieuropeísta con un futuro incierto

Nigel Farage ha convertido el Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP) en una fuerza nacional, pero está luchando por su futuro en las elecciones generales del jueves. Algunos comentaristas han apuntado que el político está perdiendo fuelle.

Rara vez fotografiado sin una pinta de cerveza en la mano, el carismático líder euroescéptico de 51 años de edad ha asegurado que dimitirá de la cúpula del partido “en 10 minutos” si no gana el escaño que se está disputando en South Thanet.

La metamorfosis de Ed Miliband

Farage recuerda a la base electoral del UKIP, hombres mayores, blancos y votantes de cuello azul, la época en que la economía se sentía más fuerte, había menos inmigración y Gran Bretaña era un país genial.

ANTIEUROPEÍSMO CON RESULTADOS

Farage, contrario a las políticas de Bruselas y a la corrección política, ha llevado al UKIP a sus mejores resultados de la historia en las elecciones al Parlamento Europeo del año pasado, en las que llegó a comparar al expresidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, con un “trapo húmedo”.

Mientras que el primer ministro David Cameron ya ha descartado la opción del partido de Farage tildándolos de “lunáticos y racistas del armario”, el UKIP defiende en estas elecciones sus dos escaños en la Casa de los Comunes y espera captar decenas de miles de votos a nivel nacional fugados de los principales partidos. El partido antieuropeísta y contrario a la inmigración masiva está tercero en las encuestas con un 14% del voto. Con su discurso fácil y populista, se esperaba que Farage triunfase en los debates televisivos pero su retórico no cuajó.

SANGUINARIO Y DIFÍCIL

Nigel Farage nació en 1964 en una familia acomodada en Kent, al sureste de Inglaterra. Su padre era un corredor de bolsa alcohólico y sus padres se divorciaron cuando tenía cinco años. Fue educado en una de las mejores escuelas privadas de Inglaterra, en el Dulwich College de Londres, donde se dice que su director lo vio como "sanguinario y difícil".

En lugar de asistir a la universidad, Farage siguió a su padre a Londres. Después de haber apoyado a los conservadores en su juventud, se unió al UKIP en 1993 como miembro fundador y fue elegido para el Parlamento Europeo en 1999, con 35 años de edad.

Farage se convirtió en el líder del UKIP el 2006. En el 2009 se tomó un receso y al año siguiente fue reelegido e impulsó al partido a la primera línea política. Farage ha sobrevivido a una serie de desgracias personales como un accidente automovilístico, un cáncer testicular y un accidente de avión durante la campaña de 2010.

POLÉMICO E INFLUYENTE

Farage ha evitado las flagrantes meteduras de pata en temas raciales que han hecho dimitir a algunos de sus compañeros de partido. Aún así, desató la polémica cuando sugirió que los inmigrantes con sida no debían ser tratados por el Servicio Nacional de Salud.

La popularidad del UKIP y su líder jugó un importante papel en su influencia euroescéptica, ya que ha conseguido que un referéndum sobre el futuro del Reino Unido en la Unión Europea haya pasado a ser una prioridad para Cameron, quien ha puesto la fecha en finales del 2017.