Un juez paraliza el veto inmigratorio de Trump

La decisión propicia que las aerolíneas acepten de inmediato a los refugiados con visado y a todos los pasajeros de los siete países musulmanes afectados

Protesta de estudiantes musulmantes contra la política migratoria de Trump frente a la embaja de EEEUU en Yakarta, este sábado.

Protesta de estudiantes musulmantes contra la política migratoria de Trump frente a la embaja de EEEUU en Yakarta, este sábado. / DA

RICARDO MIR DE FRANCIA / WASHINGTON

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Un juez federal de Estados Unidos ha suspendido temporalmente el decreto de Donald Trump para impedir la entrada en el país a los refugiados y a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana. El fallo responde a la demanda presentada hace unos días por dos estados demócratas, pero su impacto es de ámbito nacional y aplicación inmediata. Vendida por la Casa Blanca como una medida para prevenir el terrorismo, el veto inmigratorio ha dividido profundamente al país y ha provocado la revocación de 60.000 visados de viaje que ya habían sido aprobados, según ha reconocido el Departamento de Estado.

La decisión obligó a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU, la agencia federal encargada de la inmigración, a comunicar a las aerolíneas que ya pueden aceptar de nuevo a todos los pasajeros. También informó a las compañías de que los poseedores de un visado de refugiado igualmente tienen autorizada la entrada, según explicó a la CNN una de las compañías aéreas.

La Casa Blanca reaccionó con dureza a la decisión del magistrado al tildarla de "indignante", un calificativo que después retiró en una versión rectificada del comunicado. 

Aunque la reacción de la Casa Blanca se demoró cerca de cuatro horas, la de Trump no se hizo esperar y como ya es habitual lanzó un mensaje en su cuenta de Twitter: "¡Tenemos que mantener al 'diablo' alejado de nuestro país!".

Este bloqueo supone la primera bofetada para el Gobierno Trump y una victoria política para los demócratas, cuyos fiscales generales en los estados de Washington y Minesota habían interpuesto la demanda que provocó la suspensión.

NOMINADO POR BUSH

En contra del argumento de los abogados de la Administración Trump, el juez James Robart, nominado por el presidente George W. Bush, ha dictaminado que tanto Washington como Minnesota han sido capaces de demostrar “el daño irreparable e inmediato” que la orden ha supuesto para sus residentes. Su dictamen paraliza temporalmente el decreto que cerró hace una semana las puertas del país a los ciudadanos de Siria, Irán, Irak, Somalia, Sudán, Libia y Yemén durante los próximos 90 días. El texto precisaba, no obstante, que se seguirán tramitando peticiones de asilo por persecución religiosa “siempre que esa religión sea minoritaria”, lo que sugiere que se seguirá admitiendo a los cristianos.

Todos esos factores, sumados a la arbitrariedad de la ley, ha hecho que las organizaciones de derechos civiles la consideren discriminatoria. “La decisión del juez Robart, efectiva inmediatamente, paraliza la orden ejecutiva ilegal e inconstitucional del presidente Trump”, ha dicho el secretario de Estado de Washington, Bob Ferguson, tras conocerse el fallo. “La ley es algo poderoso. Tiene capacidad para obligar a rendir cuentas y eso incluye al presidente de EE UU”. La Admonistración Trump todavía no ha respondido al fallo, pero se espera que recurra la decisión.